No adhieran a lo que o se conoce a sí mismo.

Muchos aún se aferran firmemente a lo que era y a lo que debería haber sido, lo que podría haber sido. Enfrentémoslo, queridos, las líneas de marea han cambiado y ya no se puede tomar sol en las orillas del viejo yo. Ustedes son los magos y doncellas de la luz. Solo ustedes sostienen la magia de la posibilidad siempre cambiante. El resultado de toda acción es innumerable y no se puede contar con él.
En estos tiempos de cambio, muchos han perdido de vista la costa y se debaten ahogándose en una poza de marea. Cuando los vientos del cambio soplan, ustedes pueden montarlos elevándose encantados a nuevas alturas, o permitirles que los mantengan cansados y exhaustos luchando siempre contra la fuerza. Ahora llegan a un lugar de lucha o liberación. La lucha nos sujeta más, la liberación relaja lo que nos sujeta y nos liberamos del lazo que nos atrapa. Hemos estado volando contra fuertes vientos durante demasiado tiempo; hemos olvidado que podemos cambiar de dirección en vuelo y dejar que los vientos de popa nos apoyen. Lo que estaba en contra de nosotros ahora nos sostiene.

No adhieran a lo que no se conoce a sí mismo. Adhieran a aquello que alberga todo el conocimiento sin límites de tiempo. La presencia de la magia está viva y existe en la luz. Es ver a Dios con asombro infantil en todas las cosas y en todos los resultados. Crean en lo que no se ve pero se puede sentir en el corazón. Recuperen lo que alguna vez fue un hecho. El Universo deja instrucciones secretas a cada momento del día. Vuélvanse inquisitivos por naturaleza; busquen ver lo que está a la vista. Comuníquense con una faz más profunda de la naturaleza. Ella los llama ciegamente para compartir su experiencia, mientras cambia sus ropajes y acciones.

Es necesario establecer un ritmo natural mientras recorren el camino sagrado de la vida no como extraños, sino como compañeros. Observen las cualidades mágicas de la vida y tomen distancia de aquello que los abruma. La naturaleza es una gran sanadora; miren la vida desde un ángulo diferente y decidan en consecuencia. Cuando ven bajo la superficie, ven con los ojos de Dios, ven con una gran esperanza y un conocimiento profundo. Conviértanse en observadores de lo invisible para el ojo humano, pero no para el corazón humano.


Extracto de EL DESPERTAR CUÁNTICO
Un sitio en la red, un boletín electrónico mundial,
un pensamiento, una forma de vida y un “Santuario de la Verdad”
MARZO 2019 Número 243
por Gillian MacBeth-Louthan
Traducción: Susana Peralta



Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
03 de abril 2019