Una sociedad amiga de los niños. II

Una Sociedad Amiga De Los Niños
(Un comentario actualizado sobre la serie La Nación Imaginada)

Parte 2

por Daniel Jacob


La forma en que tratamos a los niños y a los jóvenes en el mundo externo es bastante indicativa de las actitudes que (secretamente) tenemos hacia nuestro propio niño mágico interior. (1)
El capítulo uno de "La Nación Imaginada" habla sobre las reflexiones que los niños traen a sus padres y al resto de su mundo, simplemente por la forma en que viven sus vidas cuando nadie está mirando. Dice que los niños son "la encarnación de ciertos aspectos de la personalidad y las aspiraciones de sus padres, que deseaban renacer y continuar en el mundo. Ellas son la pasión y la curiosidad, recién orientadas hacia los deseos y metas que puedan haber sido olvidados o dejados de lado por sus padres al buscar seguridad o posición social."

En muchos sentidos, el desarrollo de una familia única, dentro de la sociedad como un todo, tiene el mismo propósito. Una familia es para la sociedad lo que un niño puede ser dentro de una familia. Ellos "encarnan ciertos aspectos dentro de (esa) sociedad que han sido dejados de lado en la búsqueda de otras prioridades." Son cuidadores de un punto de vista singular, un programa o un conjunto de ideales dentro del Todo Mayor.

Para los fines de estas discusiones, propongo que nos refiramos a las subdivisiones de la sociedad como "clanes y tribus." Luego demostraré el significado ampliado de hacer esto.


UN NUEVO PATRÓN PARA VIVIR

En toda la historia, la relación tradicional entre padres e hijos ha sido bastante similar a las relaciones que vemos entre amos y esclavos. En casi todas las sociedades, los niños son oficialmente las posesiones de sus padres hasta los 18 años, cuando el niño alcanza la mayoría de edad. Algunos amos son benévolos, y algunos son crueles. Algunos dan a sus esclavos bastante libertad y otros se aferran a ellos con firmeza y demandan mucho.

Para cuando un niño se libera legalmente, bajo estas condiciones, muchas de las actitudes y hábitos de vida ya están profundamente arraigados. ¿Es de extrañar que cada vez más jóvenes opten por seguir viviendo bajo el techo de sus padres hasta que cumplan 30 años o más? Habiendo sido conducidos a través de un "estilo de vida" dominado por adultos y haber sido uniformemente "educados" durante sus años de formación, muchos jóvenes eligen volverse "borregos," en lugar de correr el riesgo de convertirse en personas íntegras en sí mismas.

Nos dice el Espíritu que llegará el momento en que exista una civilización cuyo enfoque principal no sea el control de sus ciudadanos. Ese día, veremos emerger un nuevo y emocionante perfil dentro de nuestra conciencia colectiva. No será la única forma en la que las personas elegirán vivir, pero claramente será una opción, una elección que muchos pueden hacer si lo desean.

En nuestra recientemente formada "Nación Imaginada," un niño se considera libre desde el momento en que él (o ella) verbaliza la decisión de serlo. Y pese a que los bebés brotan de las entrañas de dos individuos específicos, se convierten en ciudadanos libres en el momento en que toman su primer aliento. Aliento = vida. Antes de que tome la primera respiración, se considera que un feto es parte del cuerpo de la madre y, por lo tanto, está bajo su completo control.

Las madres pueden optar por amamantar a sus bebés, pero no existe el requisito de hacer más que asegurarse de que el niño esté a salvo, y puesto bajo el cuidado de alguien que realmente quiera introducir al bebé en la vida en forma física. Las personas tienen motivaciones y dones muy diferentes, que hemos explorado en una serie anterior, y que recordaremos más adelante.

Si la libertad es real, debe extenderse a todas las personas en todas partes. Esto incluye a los padres biológicos. Un niño no puede ser amado, cuidado y liberado si se siente como una carga para sus padres. Dentro de cada sociedad, hay personas cuya alegría abunda en tomarse con paciencia y fidelidad el tiempo necesario para orientar a los niños hacia lo que significa integrarse exitosamente en la sociedad. A cambio de este favor, estos niños recompensan a sus comunidades profusamente al infundirles nueva vida, creatividad expandida y alegría.

El "vínculo" tradicional que tiene lugar en las familias también podría ocurrir entre los niños y la comunidad si sus miembros estuvieran bien arraigados en un compromiso de corazón con el principio de la Unidad Universal como base social. Este paradigma está muy bien encapsulado en la frase maya "In lak´ech", que significa "Yo soy otro tú." La energía detrás de este concepto lleva el principio de "Ama a tu prójimo como a ti mismo" a un nivel completamente nuevo.


LIBERTAD PARA EXPLORAR

Difícilmente se puede abrir un periódico o un libro hoy sin leer algo que exalte la necesidad de libertad de la humanidad y el derecho de cada persona a la búsqueda de la felicidad. Sin embargo, dentro del tejido mismo de una sociedad que honra y promueve la libertad, se establecen los fundamentos de sometimiento y dependencia, actitudes que influyen y afectan drásticamente las vidas de los que están destinados a ser los cuidadores de su futuro.

La Biblia enseña: "Instruye a un niño en el camino que debe seguir, y cuando sea viejo no se apartará de él". ¿Por qué, entonces, comenzamos el viaje del niño con sometimiento y servidumbre en lugar de otorgarle independencia y respeto desde el principio? ¿Qué nos hace pensar que nuestras maneras adultas son superiores a las decisiones que tomaría cada alma si solo se le diera opción?

¿Significa esto que a los niños (o a cualquier otra persona) se les permitiría correr desenfrenadamente por las calles? ¡Cielos, no! En lugar de un sistema legal elaborado y detallado, la Nación Imaginada se basa simplemente en dos preceptos principales que se establecieron hace mucho tiempo en muchas tradiciones antiguas: "No dañes a nadie. Haz lo que quieras."

La norma del gobierno, en la forma que sea, debería limitarse a la eliminación de la AGRESIÓN o la DOMINACIÓN dentro de una sociedad, nada más. Ir más allá de eso es arriesgarse a convertirse en un controlador, en lugar de un liberador de la vida. La moral es un producto de la evolución natural de las actitudes internas. No puede legislarse. Como lo hemos descubierto nuevamente en los últimos días, la estructura social recargada puede ser costosa y riesgosa. La estructura necesita liderazgo, el liderazgo otorga poder y el poder generalmente corrompe.

Dentro de la Nación Imaginada, es responsabilidad de todos asegurar que cada persona - independientemente de su edad, raza, género o posición social- pueda vivir la vida en libertad y respeto. No nos atrevemos a preguntar: "¿Soy el guardián de mi hermano?" Somos mucho más que eso. SOMOS nuestro hermano, y él es nosotros.

La libertad de explorar, sin obstáculos, finalmente será nuestra salvación como sociedad. Eso no significa que no nos golpearemos contra algunos obstáculos en el camino. Pero significa que, cuando nos encontramos con un problema inesperado, nos damos mucho espacio para maniobrar a fin de liberarnos de cualquier dificultad que surja.

A estas alturas, es útil recordarnos que, en última instancia, LA LIBERTAD NO ES GRATUITA. La ilusión de que alguien puede obtener "algo por nada" es uno de los principales obstáculos para la difusión de la libertad por todo el mundo. También lo es la ilusión de que podemos dar "algo por nada" y seguir a flote.

Muchas organizaciones humanitarias que valen la pena están fracasando hoy, especialmente financieramente, porque se apegan firmemente al principio de que lo que hacemos el uno por el otro debe ser nuestro regalo (y el regalo de Dios) para la humanidad. Este es un buen ideal, pero carece del arraigo necesario para mantener a flote los proyectos que valen la pena. Se recoge lo que se siembra. Esto se aplica tanto a las finanzas como al karma general.

El problema principal que está en juego hoy en día es que la sociedad no es la disparidad entre "los que tienen" y los "que no tienen". Más bien, es la lucha entre "los que dan" y "los que no dan." No podemos vivir una vida totalmente equilibrada si somos unilaterales (de cualquier manera) respecto a la energía que fluye a través de nuestras vidas. Se hablará más acerca de esto a medida que continúe la serie.


LA CASA DE LOS NIÑOS

Mientras analizamos las condiciones ideales para comenzar en la vida, ¿qué tal si consideramos la idea de que obligar a los jóvenes a vivir sus vidas en espacios dominados por las personas mayores no es justo ni deseable? El principio general para la armonización en la vida es "lo similar con lo similar," a menos que los contratos específicos del alma decreten lo contrario. Con esto en mente, ¿no tendría más sentido para los niños vivir su vida cotidiana en estrecha proximidad con otros niños, alineando sus temperamentos y patrones de energía con aquellos que enfrentan los mismos desafíos que ellos?

El pueblo israelí ha estado durante mucho tiempo a la vanguardia en el estudio de estilos de vida alternativos, y ha aportado una cantidad considerable de datos a la humanidad a través de su gran experimento con el kibutz. Un punto de interés para sociólogos y psicólogos desde hace mucho, los kibutzim han ofrecido una rara mirada a la idea de mantenerse "los similares con los similares," a través del establecimiento de una "Casa de Niños" comunal, donde puedan residir los niños de la comunidad.

La primera vez que escuché acerca de este concepto fue de un compañero que pasó varios años viviendo en un kibutz, y me pareció bastante feliz. Me atrajo especialmente el material sobre la compensación de la "tragedia biológica" de los padres, o la sensación de disgusto que sienten las madres (y los padres también) cuando luchan con la rutina diaria de cuidar a los niños en lugar de disfrutar de sus hijos como individuos, dejando su cuidado diario a aquellos con un temperamento más adecuado para la tarea.

Cuando estuve en Londres recientemente, cené con una pareja israelí que me puso al día respecto a los problemas del Kibutz y la "Casa de los Niños" tal como se está aplicando actualmente. La mujer me dijo: "No muchas personas viven así todavía." Pregunté: "¿Por qué no?" Ella dijo: "Se ha demostrado que este no es el mejor entorno general para los niños.” Recordé haber pensado: "¿Quién toma esta decisión? ¿Los psicólogos, los políticos, los padres... o quién? Me pregunto si alguna vez alguien les pregunta a los niños qué quieren.


EL MEJOR DE LOS MUNDOS

Al reflexionar sobre este concepto, a la luz de mi propia experiencia personal y de las experiencias de muchos que comparten conmigo, todavía me atrae la idea de tener una "Casa de los Niños" en la sociedad. Podría ser un lugar donde los niños puedan estar en su espacio, lo que permite a los padres mantener un nido para continuar construyendo su amor. No debe hacerse obligatorio, pero debe ser una opción, disponible entre muchas otras opciones.

La principal diferencia entre la aplicación de la vida comunal en un kibutz, y su aplicación en La Nación Imaginada sería el elemento de la ELECCIÓN INDIVIDUAL. En el kibutz, los niños tenían que vivir juntos porque esa era la naturaleza del "gran experimento". Todos hicieron lo que requería el experimento. En La Nación Imaginada, el principio operativo principal es: "No dañes a nadie. Haz lo que quieras."

Si los padres biológicos y los niños anhelan vivir juntos, no se debe permitir que ningún experimento social los mantenga separados. Y si algunos padres y niños encuentran que SÍ necesitan espacio entre sí, no se debe permitir que ninguna "norma" social les dicte cómo vivir sus vidas. Lo que estamos buscando aquí es una expansión de las OPCIONES, no un nuevo conjunto de controles externos sobre quién hace qué en una sociedad determinada.

El concepto del kibutz unió la idea del sionismo con el socialismo, fijado en un contexto religioso unificado. En cierto sentido, lo mismo es cierto de los Yeshivas, hasta cierto punto. Hay muchos que creen que estos experimentos están siendo abortados debido a la infusión de capitalismo en la imagen. Personalmente, creo que puede haber un término medio que se pueda lograr entre el socialismo y el capitalismo que aún falta descubrir.

La Unión Soviética no "cayó" por estar construida en torno al socialismo. Cayó porque los políticos corruptos echaron mano al depósito de la comunidad y arrasaron el lugar. En nuestro tiempo presente, enfrentamos la posibilidad de ver al capitalismo encallado por la misma razón. En mi opinión, hay un lugar para compartir la responsabilidad "comunalmente" y también hay un lugar para el individualismo y el espacio privado. Tengo la sensación de que nuestros Niños de la Nueva Tierra serán los que nos enseñarán a combinarlos.

En cierto sentido, estoy usando estos escritos para descubrir un término medio que utilice lo mejor de "ambos mundos" en todas estas áreas del conocimiento para el bien de todos. ¡Su aporte se vuelve invaluable para el proceso! Por favor escríbanme con cualquier idea que tengan sobre el tema.

Continuará.



Publicado originalmente en la Revista Virtual Niños de la Nueva Era www.childrenofthenewearth.com
www.thestarchildren.com 
http://www.reconnections.net/child_friendly2.htm
Copyright, 2005, por Daniel Jacob. Reservados Todos Los Derechos. Se puede copiar y compartir con propósitos de crecimiento personal y/o investigación, en tanto se incluya la dirección de Internet y estos derechos de autor. Toda reproducción con fines de lucro, por cualquier medio, requiere el permiso escrito de Reconnections, Inc.
Título en inglés: a Child Friendly Society – Part 2
Traducción: Susana Peralta
Sitio oficial de Daniel Jacob en español http://www.manantialcaduceo.com.ar/daniel_jacob/index.htm


Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
09 de Agosto 2018