Satya - Cómo ayudar y donar (2da. parte)

Saber discernir

“ Las sabidurías del Alma
son las ofrendas más preciosas
para el corazón, el cuerpo y el Alma”

Comentario

Generalmente entregamos una ofrenda para expresar Amor u otros sentimientos y emociones, que existen en nuestro corazón, hacia la persona que lo recibirá.

Por esto, si nos es posible, intentamos antes conocer sus gustos y sus deseos.

Ofrecemos las expresiones de Amor intentando comprender cuáles pueden complacer a la persona, y cómo ella agradece recibirla.

En estos casos, nuestra atención está dirigida totalmente al otro, a sus deseos y a sus necesidades.

Esto también debe ser hecho cuando ofrecemos una ayuda, un consejo, nuestro conocimiento.

Todavía más indispensables esto es en el momento en que donamos las sabidurías del Alma.

Es necesario por lo tanto ser prudentes en el hablar y en el actuar, y tener siempre presente las siguientes precauciones.


Ante todo, debemos de estar atentos a no interferir de ningún modo en la vida del otro.

La ayuda verdadera puede ser dada solo cuando la persona en dificultad lo solicita.

Es ella luego que decide la solución mejor para sí.

Y la dejamos totalmente libre, aunque creamos de no haber tomado la decisión correcta.

Donamos con alegría nuestra presencia y nuestro Amor: ellos serán en ese momento la ayuda más oportuna.

Una respuesta recibida no puede tener nunca el valor de un conocimiento conquistado y experimentado.

Las palabras y las ayudas son comprendidas en relación a la evolución de la persona y su Credo.

Las palabras y las ayudas son aceptadas en base a la elección de crecer, a la disponibilidad para hacer cualquier cosa que el crecimiento requerirá.

Siempre hay un momento más oportuno para cada cosa.

La ofrenda donada es preciosa no por el valor en sí, sino en relación a las necesidades de quién la recibe.

Si donamos un diamante a quien tiene hambre y sed, no podremos saciarlo, ni calmar su sed...

En ese momento son mucho más preciosos el pan y el agua...

Compartamos nuestro Credo, con la sencillez del Niño, la humildad del Sabio, sin nunca proponerlo.

Ofrezcamos nuestra Verdad, y llevemos a amar la búsqueda de la propia Verdad.

No forzamos la aceptación de nada, pero dejamos que nuestras semillas se depositen en el corazón de quien está preparado para acogerlas.

No imponemos nuestro Amor y sus expresiones, pero despertamos el deseo de amar y de ser amados.

Podemos hablar del Cielo, si estamos atentos a las necesidades de la Tierra...

Intentamos hablar con el lenguaje conocido de quien está escuchándonos.

Podemos manifestar nuestra Esencia Divina, si osamos dar a conocer nuestra humanidad...

Podemos donar y ayudar mucho más como Viajantes de la Tierra, que como Ensayos del Cielo...

No siempre las sabidurías son suficientes:
a menudo es necesario callar...


“... Es necesario un gran equilibro en el llevar la Luz, en el donar, en el consagrarse.

Es no bajar a compromisos, sino saber hablar con el lenguaje de quien encuentras, para que ellos puedan comprenderte.

Cuando has expresado lo que crees justo para ti, estate luego atenta, para confirmar en cada momento tus palabras.

Si eres con pescadores, habla su lenguaje, y da también importancia a sus barcas, a sus redes, al pez que pescarán, a su deseo de pescar mucho: así te sentirán cerca, aun cuando no eres una pescadora.

Solo dando importancia a todo lo que ellos consideran importante, te puedes acercar a sus corazones.

Es así que, cuando sea el momento, puedes ofrecer diferentes alimentos a los de ellos, para que comprendan que, aunque no pesquen todos los peces que desean, serán igualmente alimentados; para que comprendan que no sólo el mar y el barco ofrece comida, existen además otras fuentes.

Es así que pueden desear incluso probar una comida diferente aun teniendo su pescado, pueden por algunos momentos no bajar al mar para poder conocer otros senderos.

Si luego, cambias aldea, y vas dónde no existe el mar, es indispensable que tú hables otro lenguaje, y des importancia a ese mundo, a aquello que las personas de esa aldea sienten importantes, a sus cosas, a sus deseos.

Esto, para poderte acercar, y para que ellos te puedan abrir el corazón.

Ahora comprendes que existe un grandísimo equilibrio, y que ello también es indispensable en el actuar.

Y de nuevo repito: no es bajar a compromisos, no es modificarse, es vivir la compasión total. 

Sólo así, quizás un día aquellos pescadores pueden desear las altas montañas, las Altas Cumbres, y abandonar completamente el mar.

Pero si cuando te acercas a ellos, les pides de mirar aquellas Cumbres y de desearlas, no podrán comprenderte, o se sentirán demasiado distantes, demasiado diferentes.

Tu ejemplo será la enseñanza más grande, la expresión de tu Esencia será la confirmación más grande.

Acércate a cada ‘Corazón’ con humildad y con total compasión.

Y verás cuánto, sin embargo, permanecerás siendo quien eres y expresarás tu Esencia, manifestarás tu Credo, donarás tu conocimiento.”



- Pregunta:

Me he percatado que no comprendo siempre exactamente Tus palabras, y que algún otro las comprende de manera diferente.

- Respuesta:

“ Nuestras palabras contienen muchos significados que pueden ser poco a poco comprendidos con la evolución, con el crecimiento. 

Cada uno tiene una propia historia vivida, o está viviendo una situación particular, o ha llevado consigo Antiguos conocidos, o puede tener algo que impide la comprensión. Otro puede vivir una situación, o estar en un momento de evolución, que facilita la intuición de los significados de Nuestras palabras.

A menudo ocurre que se teme de comprender un significado, porque se cree tener que cambiar luego, o de deber actuar en un modo diferente. 

Por todo esto, sé feliz cuando tienes la posibilidad de estar junto a alguien: existe siempre una inmensa posibilidad de grandes pasos, de nuevas comprensiones, de rápidas transformaciones.

Compórtate con todos con mucho Amor y agradecimiento. 

Cuando dones, cuando ames, cuando ayudes, puedes decir:

– Te agradezco porque me das la posibilidad de crecer, de comprender, de elevar mi Alma. –

No temas compartir tus sentimientos, tu comprensión.

Pide a quien está a tu lado si puedes compartir esto, y no dejar que nada perturbe tu corazón.

Si la visión del otro es diferente de la tuya, agradece sonriendo. 

Luego, en silencio escucha tu corazón, escucha tu Alma.

Pregúntate si existe algo que pueda limitar tu visión, o algún temor que impida la compresión.

PídeMe de ayudarte en esto, y permanece serena, porque así tendrás la comprensión justa para ti, para el momento que estás viviendo.


- Intuir las necesidades

- Diálogo entre dos corazones


« Estoy triste:
sé que tú puedes ayudarme,
pero no logro expresarte
aquello que me perturba... »

« No te preocupes,
no sirven las palabras.
Si estamos cerca 
tu corazón me dirá todo. »


« Me siento infeliz:
mis puertas
están tan cerradas, 
que no puedes ver nada
de aquello que existe dentro de mí... »
« No importa,
sé hacer un bonito juego:
cierro los ojos e imagino
de entrar en ti,
de vestir tus ropas, 
de vivir donde tú vives, 
de actuar como tú actúas.
Así, me es más fácil,
intuir tus deseos, 
sentir tus necesidades. »

« Estoy afligido:
he descubierto que...
ahora siento temor
de dejarte entrar... »

« No te preocupes,
me siento aquí, 
fuera de tu puerta: 
entraré solo cuando 
tú me invitarás. »

« ¿Y si me quedara 
el miedo? »

« Desde aquí afuera...
te donaré todo mi Amor:
sabe entrar
incluso con la puerta cerrada... »

« ¿Y si luego,
igualmente no te querré? »

« Yo te sonreiré...
y rogaré al Cielo
de envolverte
con sus rayos luminosos. »

« ¿Y si luego,
te llamaré? »

« Correré hacia ti, 
feliz por haber
sabido esperarte... »


- Intuir:

« Si intensamente
deseas amar,
tu corazón
sabrá entrar
en el corazón de cada uno,
para derramar Amor. »

« Si intensamente
deseas donar, 
cierra los ojos:
comprenderás cuál ofrenda 
puedes ofrecer. »

« Si intensamente
deseas ayudar,
haz silencio:
tu Alma
conoce el lenguaje
de todas las Almas. »

« Si realmente
decides consagrarte, 
imagina de convertirte
en quien encuentras:
descubrirás sus necesidades. »

« Invita a tu mente
a ir de vacaciones...
deja tu corazón
junto al corazón
de quien encuentras...

... y sigue a tu Alma:
mira con sus ojos,
escucha con su Amor, 
ayuda con su sabiduría. »

« Sonríe a tu Ángel,
aprieta Su mano, 
pídele de susurrarte
aquello que no has comprendido,
de confirmarte
las necesidades intuidas. »


- Saber escuchar y responder

- Cuando escuchas:

« Sé plenamente consciente:
estas recibiendo
un ‘secreto’ de un Alma. »

« Sé totalmente presente:
hazle sentir que 
la única cosa a la que
estas pensado, 
es aquello que ella te está diciendo. »

« Sonríele:
hazle sentir que,
en ese momento, 
es la persona
más importante para ti. »

« Mira sus ojos:
confirma que, 
en ese momento,
aquello que comparte
es la cosa más importante para ti. »

« Roza su mano:
transmítele seguridad. »

« Regálale una caricia:
hazle sentir que la amas, 
más allá de todo. »

« Abre tu corazón de niña:
vela como una niña,
ámala como una niña, »

« Siéntele solo como un Alma:
recíbela como Alma. »

« No puede saber
porque estas allí...
Regocíjate:
es un encuentro de Almas,
existe un intercambio de ofrendas. »

« Aleja la mente:
lo conocido 
puede limitarte... »

« Abre el corazón:
recibe todo
solo con Amor y con Luz. »

« Respira conscientemente:
encuentra tu ‘centro’. »

« Conéctate con el Cielo:
despégate de la Tierra. »

« Deja entrar en ti
el Amor y la Luz. »

« Llama a tu Ángel:
pide Su ayuda,
para comprender más allá de las palabras... »

« Escucha:
las emociones de tu corazón,
las sensaciones de tu cuerpo,
las vibraciones que te llegan. »

« Escucha tu Alma:
ella conoce
las viejas sabidurías. »

« Es así que intuirás
más allá de las palabras, 
más allá de las de las expresiones
del cuerpo... »

« Si intuyes algo
que no ha sido expresado:
comprende con compasión,
ayuda la expresión con Amor, 
espera con respeto, 
dona la total libertad, 
incluso de no expresar... »

« La emoción puede frenar, 
el miedo puede bloquear, 
la necesidad puede distorsionar, 
el deseo puede agrandar. »

« El sentimiento de culpa puede ocultar,
lo propio conocido puede cambiar la realidad, 
la mente puede interpretar,
una costumbre puede limitar. »

« Tal vez, 
existe un precedente ocultado, 
una finalidad programada, 
un objetivo no dicho. »


- Por lo tanto:

« Las palabras expresadas, 
no siempre son 
la expresión dicha. »

« Una expresión expuesta,
no siempre es 
una realidad. »

« Un hecho explicado,
no siempre corresponde
a lo ocurrido. »

« Puede suceder de ver
en el otro:
aquello que se desea, 
aquello que se rechaza, 
una propia parte... »

« Puede suceder de oír
aquello que no se ha dicho...
de distorsionar
todo cuanto se ha dicho...
de no escuchar
aquello que no se quiere oír... »


- Por ello:

« Si no eres testigo, 
no puedes conocer la verdad. »

« Si eres testigo,
puedes interpretar la realidad. »

« Y si lo profundo del corazón
pudo haber sido compartido,
no significa que el interior
haya emergido en superficie... »


- Por consiguiente:

« Si has intuido 
algo más allá de las palabras, 
no significa que sea
la verdad absoluta, 
la total realidad. »

« Si comprendes
que la verdad, la realidad, 
te ha sido ocultada:
sonríe con compasión. »

« Si intuyes 
que existe un intento 
no luminoso, 
desapégate en libertad,
protégete con prudencia.

Puede ser:
una prueba que vivir, 
un desafío que vencer, 
un obstáculo que superar, 
un entrenamiento que hacer,
un riesgo del cual alejarse. »


- Igualmente sonríe:

« Es un corazón que comprender, 
un niña que amar, 
un Alma que ayudar. »

« Es un medio para entrenarte, 
un lección que aprender, 
una oportunidad para crecer, 
una posibilidad para recibir, 
una ofrenda para tu Alma. »


- Entonces:

« Escucha con Amor,
recibe con compasión,
observa sin interpretar, 
acepta sin juicio. »

« Aquello que puede 
influenciar la verdad, 
interferir en la realidad, 
de quien habla, 
puede influenciar 
la capacidad de escuchar, 
puede interferir
en la capacidad de comprender,
de intuir. »

« Cada uno es libre y responsable
de lo que dice,
de cómo habla.
Cada uno es libre y responsable,
de lo que escucha, 
de cómo escucha. »


- Es así que:

« Sabrás escuchar un Alma:
comprender más allá de sus palabras, 
amarla más allá de sus expresiones, 
ayudarla más allá de sus dificultades. »


- Cuando respondes:

« Permanece en unión profunda
con quien te ha hablado.
Permanece en conexión total 
con el Cielo. »

« Inspira y exhala
el Amor y la Luz:
permanece en tu centro. »

« Asegúrate que la mente
sea todavía lejana...
Que ninguna necesidad tuya
o deseo, interfieran... »

« Observa si estas desapegada, 
si en ti sólo existe
el deseo de amar, de ayudar.
Y luego pregúntate:
– ¿Mi corazón está ligero, libre?
¿Están mis alas libres? – »

« Pide a tu Ángel
de susurrarte aquello que 
es necesario para aquella Alma, 
en ese momento. »

« Ve más allá del corazón:
escucha tu Alma,
exprésate como Alma. »

« Exprésate con la simplicidad 
de una niña, preguntándote:
– Una Niña, ¿se expresaría así? – »

« Exprésate con la claridad
de un Maestro de Luz, preguntándote:
– Un Maestro de Luz, 
¿se expresaría así? – »

« Exprésate con 
pocas palabras, preguntándote:
– Una Sabio, ¿se expresaría así? – »

« Exprésate con dulzura, 
ternura, compasión, preguntándote:
– Una Ángel, ¿se expresaría así? – »

« Si puedes, mira sus ojos, 
mantén el contacto 
con su cuerpo, 
dona una caricia, 
circunda tiernamente sus hombros
con tu brazo. »
« Antes de concluir el encuentro:
tranquilízala con confianza, 
motívala con seguridad, 
exprésale tu Amor, 
dónale un tierno abrazo, 
confírmale tu amistad. »

« Agradece al Alma
que te ha donado su ‘secreto’.
por haberte dado
la oportunidad para aprender
‘el arte de escuchar, de ayudar’. »

« Aléjate con una sonrisa, 
mantén ligero tu corazón,
deja libre tus alas... »

« Protege el ‘secreto’ de aquella Alma:
dónalo a tu Ángel. »

« Permanece en la escucha:
tu Alma
te ayudará a comprender; 
tu Ángel
te sugerirá si y cuando, 
puedes donarle otra ayuda, 
ofrecerle una nueva ofrenda. »

« Pide al Ángel
del Alma que ha 
compartido contigo su ‘secreto’,
de acompañarla,
de ayudarla, de susurrar en su corazón, 
cuánto es a ella necesario. »


- Sé prudente:

« Dona tu verdad, 
pero no inculques nada, 
ni siquiera la verdad 
que has experimentado verdadera. »

« No fuerces, por ningún motivo, 
las puertas que percibes cerradas:
puedes continuar tu dialogo, 
a través de tu mirada dulce, 
con tu amorosa presencia,
permaneciendo en un silencio acogedor. »

« No contradigas sus opiniones, 
simplemente testimonia
tu verdad.
No discutas sobre aquello que no compartes, 
amorosamente dona tu experiencia. »

« No te dejes influenciar
por nada, 
ni por aquello que ha sido expresado,
ni por aquello que no ha sido dicho,
ni por las lágrimas... »


- Recuerda:

« Si te piden 
un consejo
sobre una relación, en una relación,
no te será posible 
donar tu opinión real,
hasta cuando no hayas
escuchado a todos los interesados...

« Cada uno tiene su propia historia, 
cada uno tiene su propia visión,
cada uno tiene su propia expresión.
El presente puede ser 
el resultado del pasado... »

« No pienses en los ausentes...
como han sido descritos por los presentes... »

« Todo lo que 
se piensa, dice, 
presupone, programa, 
influenciará a las personas,
intensificará los resultados,
creará el futuro... »


- Por lo tanto:

« Recibe todo
lo que existe en un corazón.
Ayuda a liberarse
de todo lo que
ha sido creado por la mente. »

« Acompaña hacia 
la compasión, el perdón. 
Haz cada cosa posible, 
para dar espacio
a la paz del corazón,
a la quietud, a la armonía. »

« Protege quien te habla
recordándole cuanto
cuanto crean las palabras... »

« Proteges el Alma del que 
te es hablado,
evitando juicios. »

« Protégete,
permaneciendo atenta a tus pensamientos, 
responsable de cada una de tus palabras. »


- Comentario

Querida Alma Luminosa, estas son algunas pequeñas ‘Semillas’, de las grandes ‘espigas’ donadas por los Ángeles, sobre cómo comportarse en los diálogos, pero en este momento no me es posible ampliar el argumento.

Por experiencia, sé que cada ‘resumen’, puede crear temores, puede llevar a sentirse inadecuados, dar la sensación de no haber comprendido todo.

Permanece serena, el deseo de donar solo Amor, Luz, ayuda, dejará libre nuestra Alma de para guiarnos paso a paso.

Con fe, dejamos abiertos nuestros corazones, para recibir en cada momento las sugerencias de nuestros Ángeles.

Dulcemente, tengamos abiertas nuestras manos, para recibir ahora, otras pequeñas ‘semillas’.




Extraído del libro: Ayudar con la Luz y el Amor
Autora: Satya
Además de estos libros hemos publicado 22 pequeños-e-book:
http://www.suonidiluce.com/es/libros/libros/peque%C3%B1os-e-books/



Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
08 de Setiembre 2018