El karma y las vidas pasadas

Hola a todos. Es muy bueno estar aquí con ustedes en esta emisión de Luz Mundial para agosto. Me entusiasma mucho hablar con ustedes. Hoy hablaré del karma y las vidas pasadas. Es un tema fascinante para considerar, ¿no es cierto? Todos tienen creencias, y creo que en este grupo todos tenemos creencias en común respecto a la encarnación y haber experimentado muchísimas vidas. Por lo tanto, tenemos vidas pasadas. ¿No sería lindo poder acceder a algunas sin que alguien más nos hable de ellas, sino que nuestra propia mente nos revele información -la información adecuada, específicamente- porque nuestra mente subconsciente tiene almacenados todos los recuerdos de cada vida que hemos vivido alguna vez? Tenemos acceso a eso a través de la hipnosis y quiero hablar de algunos de estos beneficios y que piensen acerca de su vida, de la consciencia, de la presencia, del acceso a la información y el poder que realmente tienen si aprenden a utilizarlo.

Así que primero hablemos un poco acerca del karma, porque con la reencarnación viene la conversación del karma. El karma es los controles y equilibrio de la vida. Me gusta pensar en él como nuestra póliza de seguros para aprender. Nunca se trata de castigar y en occidente se lo ha malinterpretado un poco, especialmente a través de las antiguas religiones; en otras palabras, nos dicen que no tenemos poder, que estamos siendo observados, controlados, evaluados, y si hacemos algo mal, se lo siente como un castigo. Cuando pensamos en el karma, uno de los tipos de karma es el karma equilibrador. Lo que hacen, se les hace a ustedes. Verán, no es una amenaza. La interpretación en Oriente es que vivimos múltiples vidas con el propósito de sanar o eliminar nuestra mente condicionada. Eso es hermoso, significa que estamos evolucionando constantemente, creciendo, expandiéndonos.

Está referido a nuestro crecimiento espiritual y como resultado estamos sanando esa mente condicionada, esas creencias falsas que nos cuenta nuestro ego, esa voz interior que nos dice que estamos separados, que no somos lo suficientemente buenos, que no pertenecemos, que tenemos que ponernos a prueba. Toda nuestra sociedad ha sido construida sobre creencias falsas cuando comenzamos a verla realmente, ¿no es así? La visión occidental es que vivimos suficientes vidas y que el alma se infiltra en nuestra personalidad y lo interesante de eso es que la personalidad no reencarna. La Meg de la Escocia del Siglo XIII - y les hablaré de la regresión a esa vida pasada el día de hoy- fue muy distinta a la Meg del 2022. De modo que lo que reencarna es nuestro programa para que continuemos expandiéndonos y aumentando la expansión de nuestra alma. Y el karma es lo que lo mantiene en equilibrio.

No está referido al castigo nunca, es causa y efecto por cada acción. Por cada pensamiento hay una emoción correspondiente y por cada emoción hay un pensamiento correspondiente, controles y equilibrios.

Cuando comenzamos a pensar en vivir nuestra vida con una mente despierta, necesitamos reflexionar sobre eso por un momento, porque sabemos que la ciencia ha demostrado que el 95% de nuestro tiempo de vigilia lo pasamos de manera inconsciente en un patrón, en círculos de pensamientos y comportamiento habituales, de modo que los pensamientos impulsan acciones, círculo de nuevo, círculo de nuevo, basado en nuestra programación, en nuestras creencias, porque todos tenemos programaciones que están basadas en lo negativo y no en lo positivo. ¿Y cómo lo sabemos? ¿Están viviendo la vida con la que sueñan? ¿Están ganando suficiente dinero? ¿Están en una relación feliz? ¿Tienen un apoyo maravilloso? ¿Son corajudos y valientes? ¿Se despiertan entusiasmados todos los días? ¿Les resulta fácil seguir esa acción inspirada, esa intuición que llega, y emprenden naturalmente la próxima acción? Es flujo y reflujo. Confían en la procedencia de su dinero, confían en lo que vendrá a continuación.

Hay un flujo para esto y una validación de ello y todos nosotros tenemos áreas que estamos aprendiendo a dominar. Cuando llegamos con estas lecciones de vida, las áreas que no están del todo donde queremos que estén, en vez de juzgar comparándonos con otros, de escuchar esa voz que dice que no lo estamos haciendo bien y que quiénes somos nosotros para pensar que podemos hacerlo, que no podemos hacerlo todo, que podemos tener esto pero no aquello, sepamos que todo eso son historias que nos contamos. Todos nos contamos una historia a nosotros mismos para justificarnos y protegernos un poco del dolor que se siente al verlo y pensar que somos los responsables y por lo tanto hemos fracasado. No somos suficientemente buenos, no somos merecedores, no somos dignos de ser amados. Eso es falso. Por eso continuamos encarnando en la rueda del karma para dominar estas lecciones. Y esos controles y equilibrios están en su lugar.

Así que adentrémonos un poco en eso, pero primero quiero contarles una historia. Mis vecinos de al lado son tibetanos, son padre e hija y son amorosos. Su filosofía oriental es no dañar nada, porque no quieren ese karma. Nosotros tratamos de ser tan conscientes como nos es posible a través de nuestro día, haciendo elecciones que no afecten a otros porque no queremos ese karma equilibrador de que lo que les hacemos a los demás nos lo hacemos a nosotros mismos. Una vez más, no es un castigo sino una toma de conciencia cuando comenzamos a vivir despiertos. ¿No significa eso que empezamos a cuidar a la Tierra, a sus criaturas, a respetar el equilibrio? Vivimos juntos aquí, en este planeta, tenemos los mismos derechos como seres humanos. Podemos ver que estamos fuera de equilibrio, pero cada día tenemos elección por nuestro propio equilibrio kármico, por nuestra propia responsabilidad de ser más conscientes. Por eso, una de las cosas que hacen los tibetanos es no matar nada.

Había maleza entre nuestras dos propiedades que fue creciendo, y luego árboles de maleza, y la entrada para mi auto se estaba volviendo cada vez más estrecha y yo me preguntaba si podía arrancar esos yuyos que no eran flores ni árboles. Y ahora tenemos ese hermoso árbol entre nuestras propiedades que parece una palmera graciosa de Massachusetts, pero es su orgullo y su amor, y flores que brotan espontáneamente en su patio sin paisajismo, pero es su convicción de vivir por sus principios, sus principios despiertos. Eso me hace sentir humilde, así que cada vez que veo ese árbol de maleza, me hace sentir humilde. Me recuerda no entrar en un programa automático pensando “no me gusta”, “me quiero deshacer de eso, controlar el medioambiente”. Es inconsciente. Lo consciente es pensar que es una elección que ellos hicieron basada en una creencia muy profunda que tiene decenas y decenas de miles de años. Lo respeto y puedo aprender de eso.

Hay paz, hay una resonancia que aparece cuando hablamos de eso, ¿no? Si comenzamos a vivir de ese modo unos con otros, imaginen lo que puede suceder en este mundo.

Hay otros tipos de karma. Uno es el físico, y el karma físico es bastante literal. Por ejemplo, en su vida pasada le dispararon a alguien en el abdomen y murió y en esta vida tienen problemas digestivos inexplicables con ardor constante en el vientre cada vez que ingieren comidas pesadas, y todos los estudios para investigarlo no son concluyentes, o no hay nada ahí, de manera que eso es algo que han traído de una vida anterior.

Trabajé con una clienta que sufría de alergias constantes y trabajamos mucho en torno a eso y cuando nada lo resolvía: la hipnoterapia clínica, la búsqueda de la programación desde la infancia, buscar cuándo comenzó ese tipo de cosas sin poder lograr resultados, supe que teníamos que ir más allá, así que abrimos el puente en una sesión y regresamos a una vida pasada. Le dimos instrucciones a la mente subconsciente para encontrar el origen de esto. Su mente subconsciente toma todo lo que dicen literalmente y como una instrucción y responde. Y en su vida pasada vimos lo que su propia mente nos reveló. Ella fue un hombre que dirigía una vieja fábrica que hacía lustre para zapatos que era tóxico. Él no fue un jefe muy amable o bondadoso y como resultado muchos de sus empleados estaban muy enfermos y tenían los pulmones muy débiles por respirar eso todos los días mientras trabajaban en la fábrica.

Y en esta vida, ella constantemente sentía que su pecho estaba oprimido por esta compresión que deseaba aliviar pensando que era alergia. Esa compresión fue clave porque en realidad resultó ser la culpa que cargaba por causar ese daño a otras personas y se manifestó en esta vida como karma físico, como esa alergia que no respondía a ningún tratamiento porque era algo que su programación, (recuerden que la programación reencarna), trajo diciendo “mantenemos esta compresión en el pecho, nunca jamás volvamos a ayudar a tu gente así. Será un recordatorio para nosotros”. Pero eso también le estaba haciendo daño. Y no es un castigo. Podemos sanar y remediar el karma. De modo que al ver esa vida pasada, pudimos procesarla, pudimos hacer un profundo trabajo para perdonar en torno a eso. A través de esa vida pudimos ver que eso no era todo lo que lo definía, él también hizo muchas otras cosas buenas. Fue algo bastante inocente en aquel tiempo, no fue intencional; así fabricaban en aquella época.

Cuando comenzamos a ver y perdonar y a recibir más información, podemos desmantelar eso y entonces las alergias se solucionan solas. Comprender el origen de una condición de la vida presente en una vida pasada puede ser extraordinariamente sanador y poderoso.

Otro tipo de karma es la falsa culpa. Hacerse responsable por algo de lo que no son responsables, como hemos visto en el último ejemplo que les di. Trabajé con una clienta que tenía una sensibilidad inexplicable y dolor en los ojos. Fue al oftalmólogo, no había nada de malo en sus ojos, no aparecía en ciertos momentos del año activadores de la sensibilidad a la luz, solo ese molesto dolor de poca intensidad y sensibilidad. Y cuando ahondamos más, fuimos a una vida pasada ya que no se resolvía con los protocolos que utilizamos en esta vida actual. Habíamos limpiado toda esa programación y abrimos el puente y entramos en una vida pasada y descubrimos que ella había sido una niña con grandes poderes psíquicos en una época en la que no era seguro ser así. Era valiente e intentó decirle a su aldea, a su comunidad, que venía una tribu guerrera, vio la destrucción de su aldea antes de que ocurriese y no le creyeron porque era una niñita.

Todo sucedió, y como resultado todos perecieron y ella se sintió terriblemente culpable por eso. Cargaba una falsa culpa en esta vida pensando que si hubiera hecho algo distinto, si los hubiese obligado a escucharla, si hubiese tomado a su familia y huido con ella, entonces quizá algunos hubieran podido sobrevivir. Pero eso no fue posible. Ella comenzó a ver que esa sensibilidad ocular, ese dolor en los ojos, estaba anulando ese don, asegurándose de que no volviese a estar en ese tipo de situación otra vez. Esta clienta era muy intuitiva, así que fue muy poderoso poder verlo y hacer el trabajo de perdonar cuando se comprende qué lo está causando y por qué. Es esa falsa culpa. No era culpa suya. En nuestra historia han sucedido cosas que no pudimos cambiar necesariamente. Parte de nuestra evolución es muy dura, de manera que verlo y liberarse de esa responsabilidad por un don que tenía y con el que había intentado ayudar, es algo que puede cambiar la vida.

Cuando reconocemos algo con lo que nos estamos enfrentando ahora a partir de una falsa creencia, una falsa culpa, un falso temor, entonces podemos borrarlo, podemos hacer algo al respecto y eso se vuelve sumamente potente.

Estudiar el falso temor es fascinante porque todos hemos escuchado historias o hemos conocido a alguien. Yo conocí en el trabajo a alguien a quien lo aterrorizaba el agua pese a no haber tenido ninguna mala experiencia con el agua. En aquel entonces, él decía que tenía que ser algo de otra vida y las personas hacían bromas y le decían que tenía que venir de una vida anterior, pero era muy cierto.

Si se cayeron de un acantilado en otra vida, tienen terror a las alturas en esta. Tengo una hermana a la que le sucede eso, las alturas la ponen muy incómoda, literalmente siente que el vacío la está llamando. Y como es fumadora, cuando venía de visita y salía al balcón, ponía la espalda contra la pared, tan lejos del borde como podía, y me preguntaba si no sentía la atracción; era como si la estuviese llamando. Bueno, eso viene de algún lado, y si no fue de algo que causó un trauma en esta vida, como estar a punto de caerse o algo aterrador cuando eran niños, viene de otra parte.

Trabajé con una clienta que tenía un miedo realmente fuera de lo común y cada vez que estaba cerca de masas de agua y no las podía ver, aunque fueran poco profundas y apenas le llegaran a los tobillos, tenía ese vívido temor de peces mordiéndola, y por eso nunca disfrutaba realmente las vacaciones, no disfrutaba los viajes. Si iba a la playa no quería entrar en el agua porque siempre tenía esa imagen vívida de esos pececitos mordiéndole los pies. Viajamos a la vida que era el origen de ese temor, ya que la mente subconsciente toma la instrucción y va específicamente a esa vida. Ella vio que era un pescador en una gran plataforma pesquera en el océano y la tripulación capturaba los peces grandes, pero también atrapaba en las redes los pequeños y los almacenaba en congeladores situados debajo del puente. Luego el capitán dirigía el barco al puerto, ellos cobraban sus ganancias y él les pagaba a los demás pescadores.

Ella era uno de los pescadores y en esa vida, hubo un mal funcionamiento de la maquinaria, la red que traía miles de peces se rompió y todos los peces se escaparon. Él resbaló y se cayó y quedó tendido y todos los peces comenzaron a morderle los brazos, las piernas, los pies. Por eso en esta vida ella tenía un recuerdo muy vívido de esos pececitos mordiéndola y por ello estaba siempre incómoda cerca del agua. Como verán, es falso porque no pertenece a esta vida, pero es un miedo muy válido que proviene de la experiencia de una vida anterior que dejó programación, que dejó una creencia en la mente subconsciente: “No vayas al agua”, porque la mente subconsciente generaliza. Su programación decía: “Cada vez que estés cerca del agua podrías ser mordida por todos esos peces”. Cuando desbaratamos ese temor, lo reprogramamos y trabajamos con las nuevas sugerencias positivas, el temor se disipó. Le tomó tiempo, necesitó unos pocos meses para superarlo, pero dio pequeños pasos y hace un par de semanas me envió una foto. Se anotó para aprender buceo, lo que es asombroso.

Podemos sobreponernos a cosas que traemos en base a cómo el karma supervisa nuestras vidas para que de veras podamos remediarlo. La manera en que lo hacemos es realmente asombrosa, porque el karma está basado en nuestras acciones, en nuestros pensamientos, en nuestras palabras y en nuestras emociones, así que del mismo modo en que las acciones, palabras, situaciones de vidas pasadas pueden causar esas creencias, podemos desentrañarlas con esas mismas aplicaciones y lo que creó algo negativo puede crear algo positivo.

La manera en que aparece una vida anterior es siempre muy vívida. Cuando tienen sueños recurrentes, o cuando tienen un sueño, hay marcadores, criterios que les hacen saber que proviene de una vida pasada. Evocan emoción, lo sienten profundamente, despiertan de un sueño que parecía muy real. ¿Cuántos de nosotros hemos pasado por eso? Es muy real, fuera del tiempo actual, evoca una fuerte emoción y sabemos que no es actual debido a la forma en que el sueño se nos revela. Es la mente subconsciente mostrándonos la programación. Pero está fuera del tiempo actual, sabemos que es de otro tiempo diferente al que estamos experimentando ahora en nuestra vida y nunca lo olvidamos. Nunca jamás lo olvidamos porque es muy vívido. Generalmente, ese es un indicador de que es una vida pasada que se nos revela.

Es un programa y la mente subconsciente que les comunica que tienen algo activo que está siendo activado por su expansión de alma, por su crecimiento, que quizá han alcanzado un punto donde repentinamente todo eso los está inhibiendo y la mente subconsciente les está mostrando el conflicto que está teniendo lugar internamente para que puedan traerle recursos, puedan volver, investigarlo, colapsarlo, reprogramarlo. Comienzan a ver que el karma es nuestro amigo, no un castigo; es un sistema de controles y equilibrios con el que podemos trabajar conscientemente cuando sabemos cómo.

Otra cosa que me resultó muy interesante es el libro Soul Survivor de Bruce y Andrea Leininger, algo que fue verificado por científicos. Era la historia de James Leininger, él es el protagonista y es el caso de la reencarnación de un niño muy conocida. A los dos años de edad, James tenía pesadillas frecuentes de estar atrapado en un avión en llamas que se estaba estrellando –emoción vívida, fuera del tiempo presente, totalmente inolvidable, lo que concuerda con el criterio para vidas pasadas. En declaraciones posteriores a sus padres les dijo que su avión había sido derribado cerca de Iwo Jima y que había estado en un buque llamado Natoma y que su mejor amigo se llamaba Jack Larson.

Esos eran detalles verificables que les contó a sus padres, quienes comenzaron a investigarlo y resultó que eran un hecho. En realidad, volaron allá porque Jack Larson era un veterano de noventa y tantos años que aún vivía en esa época y James se encontró con él y en cuanto lo vio supo su apodo, lo reconoció de inmediato como un niño reencarnado de dos años. De modo que recordó que había sido un piloto muerto en acción en marzo de 1945. ¡Extraordinario! ¿Pero por qué pudo recordar eso y nosotros no podemos recordar lo nuestro?

Como hipnoterapeuta clínica, lo fascinante es que antes de los siete años no hemos desarrollado ese factor crítico, ese analizador de información que se halla entre la mente consciente y la subconsciente de modo que todo entra en nuestras mentes, lo tomamos de nuestros padres, de nuestras figuras de autoridad, de nuestra experiencia de vida. De inmediato, todo va directamente a la mente subconsciente. Todavía no tenemos lógica, no tenemos razonamiento ni capacidad de razonamiento en nuestra mente consciente. Eso significa que en primer lugar estamos recolectando una enorme cantidad de programación que explica por qué cada uno de nosotros tiene una programación y no deberíamos emitir juicio alguno ni tendría que ser motivo de vergüenza.

Se han estudiado dos ondas cerebrales infantiles y antes de los siete años ellos no están en estado Beta, muchos de ellos están en los niveles subconscientes de alfa y a veces de delta durante el día mientras están despiertos. El resto de nosotros tenemos que caer en ese profundo estado de hipnosis, esa hermoso relajación, para tener acceso a nuestro subconsciente. Pero los niños andan todo el día en ese estado. Fíjense cuán creativos son, la mente subconsciente es literal en su conciencia de imágenes y ellos están fuera en sus mentes, solo están caminando en mente subconsciente y superconsciente. Y la mente superconsciente es el Campo y ese es el acceso a todo, de modo que ellos dejan que entren todos esos recuerdos y programación de ese subconsciente. Recordando ese trauma ahora, James estaba tratando de resolver el trauma de su vida anterior. Las pesadillas, el programa, estaban apareciendo, los detalles vívidos que eran verificables porque era una pura corriente de superconsciencia. ¡Qué extraordinario!

Los niños antes de los siete años tienen mucho más para ser valorado si estamos prestando atención. Y la sociedad nos ha enseñado a anularlo, o pensar que están inventando o imaginando cosas. ¿Cuántas personas espirituales recuerdan haber visto o escuchado cosas o haber tenido amigos imaginarios? Superconsciencia. La mente subconsciente recuerda todo antes de nuestra capacidad de tener información comparada, incorporando esa información y comparándola con nuestra programación. No tenemos esa capacidad, todavía no se desarrolló, no evolucionó y ellos aún están nadando en este hermoso mar de la superconsciencia y el inconsciente. Y hay muchísimos ejemplos más que se pueden verificar. Ahora la ciencia está comenzando de veras a honrar y apreciar y aceptar el concepto de la reencarnación, y que podemos acceder y verificar nuestras vidas pasadas.

Hacemos algo más con vidas pasadas que pienso es asombroso, un adicional. No es cómo llevamos el karma sino cómo podemos utilizar la terapia de la regresión a vidas pasadas. Y eso es ir a algo positivo donde desarrollamos una habilidad o destreza que nos podría ser útil ahora, porque a través del karma y la reencarnación estamos eligiendo diferentes lecciones de vida para nuestro crecimiento. De modo que nos corresponde saber que en vidas anteriores hemos dominado algo más con lo que en este momento no estamos trabajando activamente, lo hemos olvidado por completo y podríamos tener esa habilidad innata que está latente y podemos despertarla si es algo que nos podría ayudar hoy. Y podemos hacerlo.

Quiero que sepan que el 24 de septiembre voy a guiar a un grupo de personas a través de una sesión de terapia de regresión a vidas pasadas a una vida donde descubrieron una habilidad positiva que los ayudará justo ahora.

Tuve una vida pasada de la que les voy a hablar rápidamente. Experimenté mi primera regresión a una habilidad o destreza positiva y fue extraordinario, porque al principio parece que una lo está inventando. Me vi trabajando y el fuego estaba encendido. Era Escocia, en el siglo XIII, y yo estaba trabajando para un clan, la familia. La casa era grande y yo estaba trabajando en una esquina en la parte de atrás. Era una sanadora y estaba creando una cantidad de medicinas en ese momento: cataplasmas, tinturas, hierbas secas. Trituraba hierbas, les agregaba líquidos haciendo tinturas. Trabajaba muy, pero muy duro, y me sentía completamente exhausta, pero era mi trabajo y lo que hacía, y era mi servicio.

Vi muchísimos niños, puedo recordar vívidamente a muchos niños que venían a mí. En esa época no había penicilina, esas personas morían siendo muy jóvenes por infecciones, neumonía; esas cosas estaban rampantes y yo veía a muchísimos niños. Pero eso me explicó algo. Ocurrieron muchas cosas asombrosas. Seguí viendo algunas partes hermosas de esa vida, una hermana, un matrimonio. Le pasaba la información que estaba obteniendo a su hija, pero es interesante porque me explica algunas cosas de mi vida actual. Nunca sentí el deseo de tener hijos en esta vida y siempre me sentí algo culpable por eso. Cuando conozco gente, me preguntan si tengo hijos y cuando les digo que no, se quedan algo cortados. Y yo pienso que tengo montones de perros pero no tengo bebés. Nunca me atrajo en esta vida, sencillamente no era para mí porque en aquella vida me ocupé de los niños de todos.

Me traían sus hijos para todo: cortes, raspones, infecciones, cuidé a montones de bebés y ya no quiero cuidar más en esta vida y eso realmente me liberó un poco de esa sensación de culpa, porque como mujer se supone que uno tenga hijos. Es lo que una hace. Y eso se disipó porque hice una tarea realmente buena con eso.

Eso también explica la capacidad que tengo en esta vida, que no sabía de dónde venía y que me encanta. Preparo todos mis productos de cuidado corporal, la mejor manteca corporal de chocolate que hayan visto en su vida. Huele deliciosa, es tan limpia que casi se la podría comer, excepto por la manteca de karité. No querría que ustedes comieran manteca de karité, pero todo lo demás es de calidad alimentaria. Y no sabía de dónde vino. Desarrollé la receta y los perfumes de aceite esencial con lavanda, y jazmín, y rosa, y ciertas combinaciones, y no sabía de dónde lo sabía, pero para mí era importante vivir una vida que no fuese tóxica. Y de pronto descubrí que eso venía de un antiguo linaje y lo había aprendido de mi madre y de la madre de mi madre y yo se lo pasé a mi sobrina. Para mí fue extraordinario saber de dónde provino y que soy parte de ese linaje y tengo acceso.

Y aquí es donde se pone interesante. Poder tengo acceso a volver a esa vida tan seguido como uno quiera, tener conversaciones y recoger más de esas destrezas. ¿Qué tal? ¿No es asombroso? ¿No se convierte en una herramienta valiosa para comprender mejor quiénes somos y traer más a nuestra misión y a nuestro propósito aquí, a nuestra confianza y amor y pasión para vivir nuestra vida con un propósito, quiénes somos ahora sintiéndonos bien, derrumbando cualquier vieja programación que diga que no somos suficiente, porque cada uno de nosotros es suficiente? Así que gracias por eso.

Quiero que piensen en eso desde ahora hasta el mes que viene, qué podría estar ocurriendo en su vida que provenga de otro tiempo y que ya no tienen que cargar más: falsa culpa, falso temor, karma físico, cosas que parecen inexplicables que ya están listos para soltar. Y si quieren un trabajo personal, me encanta trabajar con las personas, eso es lo que me apasiona. Estaré encantada de atenderlos y tener una conversación. Ofrezco consultas gratuitas de treinta minutos y luego podemos ver si reservan sesiones para ustedes. Si hay algo que quieren investigar conmigo, será un honor.

Con eso los llevo de regreso al estudio y les deseo que disfruten del resto de la presentación. Como siempre, gracias por permitirme entrar en su corazón y en su hogar. Significa mucho para mí y espero que encuentren mi ofrecimiento valioso, esclarecedor y que invite a la reflexión. Hasta la próxima vez. Hasta luego por ahora.


Meg Adamson-Gour
Presentado en vivo en GlobalLight el 16 de julio de 2022
https://www.espavo.org/globallight/
Traducción: Traductoras voluntarias de Espavo



Fuente:   www.trabajadoresdelaluz.com