Lee Carroll y Monika Muranyi en la Cumbre de los Guardianes de la Tierra. CUMBRE DE LOS GUARDIANES DE LA TIERRA

Lee: Ante todo quisiéramos agradecer la invitación a este gran evento.


Monika: Creemos y apoyamos todo lo que esta cumbre representa porque cada persona en este planeta, lo sepa o no, es un Guardián de la Tierra. Antes no se hubiera podido transmitir esta cumbre con tantos invitados. Este formato de la Cumbre está disponible ante todo debido a la situación actual y a los avances de la tecnología. Hoy tenemos la oportunidad de hablarles de algunos de los temas más importantes de nuestro tiempo.

Lee: Vengo canalizando a Kryon desde hace más de 31 años y hemos escrito muchos libros juntos y también solo y visitado decenas de países, sin embargo hoy en día la información puede llegar a más personas en una semana que en un año gracias a la virtualidad. Mi colega Monika también es maestra y autora. Su primer libro “El efecto Gaia” detalla los atributos de nuestro gran planeta.

Monika: Por más de una década, Lee y yo hemos estado presentando nueva información profunda, esotérica por todo el mundo, de la misma índole de lo que se habla en esta Cumbre. Queremos hacerles preguntas cruciales acerca de cómo se ven a sí mismos hoy en día y si están conscientes o no de la parte que juega nuestro planeta en nuestras vidas. Si es la primera vez que oyen que Gaia tiene un rol activo en su vida, entonces este es el programa para ustedes.

Lee: Antes de comenzar quiero hacerles una pregunta personal y profunda: ¿Cuál es su historia, o lo que llamamos su narrativa? Les explico. Básicamente esta es una descripción de sus creencias, su programa. Puede ser lo que aprendieron de niños en la escuela, en la iglesia, incluso maestros y personas que respetaban. Lo llamamos su narrativa, pero muchos lo llaman su verdad. Cualquiera sea el nombre que se le asigne, todos lo tienen inscripto en su cuerpo, es la esencia de su filosofía y sus creencias basadas en una verdad aprendida y aceptada que están poniendo en práctica. Pueden ser sus creencias espirituales o como se sienten respecto a temas profundos, pero es su esencia y les pertenece. Y es el filtro con el que ven su realidad. Queremos contarles una historia para que vean cuán poderosa puede ser esta narrativa.

Monika: En 1991, el médico australiano Barry James Marshall hizo un hallazgo histórico. Descubrió que una bacteria causaba las úlceras. No era la creencia de la época. Después de todo, todos los médicos sabían que la causa era el estrés. Marshall revisó cuidadosamente su teoría, pero solo tuvo menos de un 10% de credibilidad.

Lee: ¿Cómo era posible que rechazaran las pruebas obtenidas por el mismo método de investigación científica que utilizaban ellos? Marshall estaba tan frustrado por el rechazo que en 1984 hizo algo inusual y bastante peligroso. A sabiendas de sus colegas, bebió la bacteria e inmediatamente desarrolló úlceras y luego se curó con los anticuerpos que había creado a partir de esta bacteria. Como nadie sabe qué cantidad es seguro beber, algunos dicen que casi se murió antes de curarse. Esa sociedad médica tenía una historia y regía la medicina de esa época: “Las preocupaciones, el estrés, causan úlceras”. Y que nadie les dijese lo contrario. Toda la industria farmacéutica lo creyó durante décadas. Asumían que los ansiolíticos eran la respuesta para evitar el estrés, que era el supuesto causante. Era conocimiento general, además de sonar inteligente, táctico y verdadero. Esta narrativa estaba tan instalada que ni la evidencia científica podía erradicarla. Era su verdad y no querían cambiarla.

Monika: En 2005, Marshall y su colaborador de toda la vida, Robin Warren, ganaron el Premio Nobel por el descubrimiento de la bacteria Helicobacter Pylori y su rol en la gastritis y la úlcera péptica. Lee y yo creemos que debería haber ganado otro premio por reescribir la narrativa del planeta. Como maestros, muchas veces estamos contra una narrativa que ha estado vigente en el planeta durante siglos a la que le suele faltar información vital o simplemente es mitología. Con Lee queremos revelarles el papel espectacular que tiene el planeta en nuestras vidas y cómo nos ayuda a sanar de diversas maneras. ¿Qué creen que dice la narrativa actual sobre el papel del planeta en nuestras vidas y que está vivo?

Lee: Observamos los sistemas de creencias de las principales religiones del mundo y todas, o al menos un 90% de ellas, el Hinduismo, Budismo, Judaísmo, Islam, Confucionismo, Taoísmo, Cristianismo, ninguna de ellas destaca el rol fundamental que tiene nuestro increíble planeta en sus sistemas espirituales. Observemos ahora todas las que hemos conocido o estudiado de los registros de los indígenas de nuestro planeta. Me encanta. Porque si lo vemos con perspectiva, ellos no se conocían, no tenían contacto, raramente viajaban, y sin embargo todos coincidían en que la Tierra, Gaia, era nuestra principal compañera y maestra espiritual. Y esto es anterior a muchos de nuestros libros de historia. Gracias a otros recursos, como la oralidad y otros métodos para descubrir qué creían, hemos encontrado que estos grupos conocían todo sobre la Madre Tierra, Gaia. ¿Será que hemos perdido completamente de vista uno de los atributos más poderosos de nuestra potencial conexión espiritual y maduración espiritual? ¿Podrá ser que durante todo este tiempo haya habido medicinas de sanación, orientación, intuición, e incluso conexión con nuestros ancestros del planeta? Pregunto de nuevo, ¿cuál es su historia? ¿Cuál es su narrativa y su verdad?

Monika: Tenemos una nueva energía increíble en el planeta. Incluso el hecho de que esta Cumbre tenga tanta aceptación entre miles de personas nos indica que están dispuestas a cambiar su narrativa, a considerar la sabiduría ancestral de los indígenas y cambiar su verdad. Kryon, canalizado por Lee, nos ha dado esta información durante años a través de 14 libros. Kryon nos dijo no solo lo que podría suceder sino cómo podría cambiar nuestra verdad. Lo que más me apasiona de Lee y Kryon es mi intento de recopilar décadas de valiosa información y categorizarla. El foco de mi vida ha sido estudiar a Gaia. Tengo una licenciatura en Ciencias Aplicadas y me gradué con honores y me entrené en Nueva Zelanda y trabajé como guarda parques durante 15 años. Cuando descubrí las verdades esotéricas de cómo la Tierra es parte de nuestra vida espiritual, quedé asombrada. Tal fue la revelación que me vi obligada a escribir y difundir el mensaje acerca de esta profunda conexión y asociación que tenemos con la Madre Tierra. En instantes les daré unas citas de Kryon dadas a lo largo de los años acerca de cómo se relaciona nuestro planeta en gran medida con nuestra vida cotidiana.

Lee: Monika y yo viajamos a lugares históricos y exóticos estos años anteriores tratando de pasar el mayor tiempo posible, cuando podíamos, con los indígenas. A veces hablaban con nosotros y otras veces, no. A veces teníamos que ganar su confianza o volver reiteradas veces para que vieran que estábamos sinceramente interesados en su sabiduría. Nunca olvidaré una experiencia reciente en Perú con un chamán de la tribu Qero que vive en las montañas, lejos de Cusco, Nicolás Pakar, quien lideraba nuestro grupo. Estábamos todos reunidos en un cerro, buscamos a Nicolás y lo rodeamos y comenzó la enseñanza. Indicó que se iba a enseñar algo profundo y tenía razón. Son cosas que no olvido. Se agachó y recogió una pizca de tierra y la puso en sus labios. Hizo una pausa, entró en estado meditativo mientras lo mirábamos. Y nos habló. Nos contó su verdad sobre la vida en el planeta. Su verdad es que sus ancestros son parte de la tierra que compone todo el planeta. Se comunican con él y él escucha sus sabios consejos. Con intención, puso la tierra en sus labios para contactarse con ellos.

Monika: ¿Les resulta extraño que la información antigua quede almacenada de forma multidimensional dentro del planeta? Por todo el planeta, los que creen en un Dios amoroso o algún tipo de fuente creadora, creen en los procesos multidimensionales. Parece ser parte de Dios. Él puede escuchar millones de oraciones a la vez y conoce su nombre. ¿Por qué parece tan increíble que el planeta también pueda ser multidimensional? Nicolás, nuestro chamán peruano se contactó con sus ancestros a través de una parte del alma de ellos que vive en el planeta, y no es el único en creer que el planeta Tierra es parte del ciclo de vida que incluye animales, naturaleza y humanidad. Kryon nos ha dicho que hay una red cristalina que recuerda la emoción y la acción humanas. Imaginen a una parte del planeta que recuerda parte de su vida. ¿Están atando cabos? Esta rejilla cristalina de información explica por qué podemos sentir o percibir la energía de un antiguo campo de batalla incluso si ignorábamos que estaba allí. La verdad está en la tierra. Nuestras vidas son parte de la tierra en maneras que no nos enseñaron en nuestra vida actual.

Lee: Los indígenas realmente tienen un sistema, pero no es una estructura en sí. Su sistema está en sus vidas, ellos carecen de las doctrinas de la vida moderna. Su religión está basada en la Naturaleza. Todo lo que los rodea es el planeta, sus ancestros, su vida. Confían en la forma en que funciona, en lo que ven y hacen cada día. Queremos compartir parte de la sabiduría de Kryon respecto a un factor ausente en nuestra espiritualidad actual. No estamos sugiriendo volver a la antigüedad o al estilo de vida de los indígenas. Más bien, queremos compartir una verdad ancestral profunda y conocida: Este planeta nuestro es una parte profunda, servicial, fundamental, de nuestra espiritualidad y de Todo Lo Que Es. Nos ayuda a cumplir nuestros deseos de una vida maravillosa, llena de amor, paz y salud. Pueden comenzar a reescribir su propia historia si así lo desean y usar esta comprensión en su beneficio, incluso en una gran y moderna ciudad.

Monika: Quiero compartirles la sabiduría de Kryon dada en un entorno moderno sobre su relación con Gaia. Cuando estuvimos en Irlanda, la isla esmeralda, también llamada la tierra de la gente pequeña, Kryon dijo: “Cuando los tiempos eran diferentes y todo lo que tenían los seres humanos eran las estrellas, la naturaleza y los animales, la Tierra era parte de ellos. Había un conocimiento profundo y claro de que la Tierra era parte de la humanidad, no estaba separada de ella. Todo giraba en torno al vínculo con la Tierra y los seres humanos en ella. ¿Recuerdan la expresión “Polvo eres y en polvo te convertirás”? Es verdad. Corporalmente, somos parte del planeta. Provinieron del polvo de la Tierra, pero no tienden a pensar eso. Nacieron en una habitación limpia y moderna, se mueven en espacios cubiertos, caminan sobre cemento, nunca entendieron que eran parte de la tierra del planeta. El agua misma que cae sobre sus cabezas solía estar en el océano. Luego va al cielo y regresa, y va y viene. El ciclo es el mismo con ustedes y la única razón por la que lo señalamos es porque allí hay un flujo de energía, una conciencia con la tierra, una amistad con ella. Y si se separan de ella y viven día a día en una sociedad que no la honra, pierden algo, pierden uno de los mejores amigos que hayan podido tener. Es quien los sostiene aunque nunca la toquen. Siempre estará ahí. Se llama la Rejilla de Gaia”.

Hay otra cita de Kryon que recibí en Siracusa, Nueva York. “Amados, conocidos por la Tierra, son amados por la Tierra. Aquellos de ustedes que lidian con asuntos terrenales, la naturaleza, los animales, incluso el estudio de las piedras y el suelo, y cuando caminan por ciertos lugares pueden sentirla, la inteligencia que es Gaia les habla. Hay una confluencia de energías que los envuelve, que dice: “Yo te conozco, tú perteneces aquí. Oh, ser humano, lo que tú haces aquí eventualmente cambiará el Universo. ¿Puedes sentirlo?” ¿Cuántos de ustedes han caminado solos en un bosque y sintieron la compañía de los árboles. Eso es real.

Lee: Monika les dijo que hay un vínculo con la Tierra. Es así. Eso no se aprende en ceremonias, es una relación. Como todo vínculo, implica amor y responsabilidad. Pregúntenles que sienten a los que abrazan los árboles. Algunos se emocionan por haberse conectado con Gaia. Algunos dicen: “Está bien, me convenciste. Quiero saber más. ¿Cómo empezó si nunca la conocí? ¿Cómo empiezo una relación que nunca tuve? ¿Cuál es la mejor manera de reescribir mi historia para incluirla?” Otros están confundidos y desconfiados y se preguntan cuál es el juego aquí. “No pensé que me faltaba algo, todo está bien, no creo necesitar nada de eso. Tal vez eso funcionaba en el pasado”. Bien, para los que se preguntan eso, les compartiré una historia en un momento. Primero respondamos la primera pregunta, la más apremiante. ¿Cómo podemos comprender, en un mundo moderno, el vínculo que tenemos con nuestro planeta y qué podemos esperar?

Monika: Me gustaría darles unos recursos para que puedan integrarla en su vida. A través de mis libros pude tener el honor y el privilegio de formularle pregunta a Kryon y me encantaría compartirles ese intercambio que tuve cuando escribí “El efecto Gaia”. Le pregunté: “Querido Kryon, los indígenas le hacían ofrendas a Gaia continuamente y tenían una conexión muy intensa con la conciencia de Gaia. ¿Deberíamos replicar lo que hacían ellos o nuestra intención de conectarnos con ella es suficiente?” Kryon respondió: “Querida, la intención es suficiente en esta nueva energía en desarrollo. Cada vez se están pareciendo más al planeta de formas que no pueden imaginarse. Las ofrendas son un lindo recuerdo ceremonial, pero reconocer a Gaia es ponderar el amor de Dios a diario y saber que la Madre Gaia es nuestra conexión con una Fuente mayor. Retomar la sabiduría ancestral indígena cuando Gaia tenía un rostro y un bello sistema que elevaba a cada persona. Esa es la ofrenda que quiere Gaia para una raza humana avanzada”. ¿No es una respuesta hermosa la de Kryon? Teniendo en cuenta esa conversación con Kryon, desarrollé un diálogo diario con Gaia que me gustaría compartirles. Lo retomo cuando estoy caminando en la naturaleza, rodeada de hermosos árboles, o de lagos, o el océano.

La mayoría están viendo esto en un dispositivo en una ciudad moderna, en una habitación, y no en un área prístina de Gaia. Eso no cambia nada porque esa conexión con Gaia es fácil de generar. Cuando piensan en alguien que aman y no está en la habitación con ustedes, cuando cierran los ojos, se conectan con esa persona y es como si estuviese a su lado. Del mismo modo nos conectamos con Gaia. Repliquemos eso juntos ahora. Coloquen las manos sobre su corazón e incluso pueden cerrar los ojos si lo desean. Permitan que su respiración se calme inhalando y exhalando profundamente y pongan su atención, su enfoque y su conciencia en el hermoso planeta Tierra que los alimenta, los acoge y los nutre, quien los apoya incluso en su camino espiritual, Gaia está aquí para ustedes. Mientras nos enfocamos en Gaia perciban, sientan, imaginen los lugares más prístinos de Gaia que los atraigan más. Pueden ser las montañas, la selva, el océano, el espacio que más los convoque. Ábranse para sentir esa hermosa energía de Gaia fluyendo por cada célula de su cuerpo y ahora le vamos a agradecer a Gaia en esta breve comunicación: Gracias, Gaia, por estar aquí. Gracias, Gaia por amarme.

Ahora pueden relajarse, bajar las manos. Abran los ojos si los tenían cerrados. Esta es una forma muy simple de agradecerle a Gaia. Pueden desarrollar su propio diálogo con ella con sus propias palabras, con su propio estilo. El punto es que Gaia realmente quiere escucharlos y no se sorprendan si comienzan a obtener respuestas. Verdaderamente, volver a conectarnos con el planeta es sencillo, comienza con su intención de comunicarse con ella.

Lee: Recuerden que Kryon dijo muchas veces que el Espíritu no está en un vacío. Reiteró que el Espíritu está presente, los conoce, sabe lo que están haciendo, responde a su llamado sin tener que gritar. Veamos la segunda pregunta. “¿Por qué debería hacer esto, Kryon. Nunca lo necesité en todos estos años, ¿por qué ahora sí?” Les responderé con otra historia que Kryon contó durante años. Es una parábola de un hombre llamado Walt. A Walt le dieron algo increíble en esta parábola. Le dieron un avión 747 con tripulación incluida, un aeropuerto y una larga pista de aterrizaje. Recordemos que es una metáfora, pero en esta parábola la tripulación obedecía los deseos de Walt sin cuestionarlo. Así son los ángeles y los guías. Ellos no dicen mucho ni aconsejan demasiado, pero actúan cuando se los solicita. Siempre están ahí. No necesitan alimentarlos, no necesitan darles un lugar para vivir. La historia continúa. Walt comienza a usar el avión y está feliz con su desempeño. No podría tener nada mejor y le encanta. Imagínense con un avión 747 y su tripulación, excelente comida, en primera clase y todo incluido. El hombre fallece y otros que sabían de su regalo le preguntaron cómo se sentía tener su propio avión 757 y pasarla tan bien. Todos escucharon sus aventuras atentos a sus historias y sus comentarios. “Fue genial. La pista de aterrizaje es muy larga”, y relataba cada detalle de su movimiento, los giros, la velocidad, la longitud de la pista, las cenas que le servían en el avión y cómo circulaba el avión en la pista. Verán, Walt no tenía ni idea de que la aeronave podía volar. Y sus amigos tampoco. Todos tenían la misma historia: “No puedes volar”. Estaban satisfechos con carretear por la pista sin saber lo que tenían. Todos tenemos el vínculo con la Tierra. Ha estado todo el tiempo con nosotros. ¿Cuál es su narrativa? Es solo el polvo, el lugar por donde caminan. Para muchos no tiene nada que ver con la espiritualidad, tampoco tenían idea de que estaba viva. ¿Y si pudieran volar con ella y nunca lo supieron? ¿Y si toda esta historia es sobre eso? En este momento, la sociedad no cree en ello. ¿Hay una verdad incompleta aquí? Les estamos diciendo que sí. ¿Están bien con eso? ¿Qué pensarían si les dijera que realmente podían volar y nunca lo supieron? Pregúntenle al o la indígena más sabia del planeta sobre el rol que tiene la Tierra en su verdad. Luego prepárense para sentarse a sus pies por largo tiempo mientras les revela una verdad que tal vez nadie les contó y resuena en amor y sabiduría.

Monika: ¡Qué hermosa parábola, Lee! Podría oírla una y otra vez. Haremos una breve meditación y escucharemos una canalización de Kryon. Pero antes, Lee y yo queremos agradecerles que nos hayan dedicado este tiempo. Esperemos que continúen su vínculo con Gaia, porque ella está lista para recibirlos.

Cerremos los ojos y volvamos a nuestro hermoso y prístino lugar de Gaia y dejen que fluya la conexión que tienen con ella. Hay una energía que puja por salir del planeta hacia ustedes. Pónganle atención a la energía de sus pies. Sientan, perciban, como fluye la energía de Gaia hacia sus pies y todo su cuerpo. Ahora enfoquemos la atención en la Rejilla de Gaia. Dentro de nuestro planeta está la rejilla que está llena de energía y acción de cada paso que dieron sobre la Tierra, de los pasos que sus ancestros dieron sobre la Tierra. Y con ese conocimiento, esa energía todavía está ahí de manera multidimensional dentro del planeta. Démosle permiso a esa conciencia con intención para que ingrese en nuestro cuerpo. Aceptamos esta hermosa sabiduría de la Rejilla de Gaia. La invitamos para que se acerque un poco. Ahora les pido que visualicen una capa o un manto colocado sobre la Tierra. Gaia está diciendo: “Bienvenido, querido amigo, te vemos, te reconocemos como un Guardián de la Tierra. Bienvenido, querido Guardián de la Tierra. Nos asombra tu magnificencia”. Y ahora demos un paso al costado para permitir que la comitiva de Kryon les transmita su mensaje.



Kryon: Saludos, queridos, yo soy Kryon, del Servicio Magnético. Este mensaje es corto, pero profundo. Las cosas se están uniendo en el planeta cada vez más de un modo que no esperaban. Mientras esta información puede parecerles grandiosa, profunda y esperada, ¿qué pasaría si les dijese que para que el planeta pase al siguiente nivel de conciencia, de ascensión, de despertar, más y más personas tienen que entender y aceptar y trabajar con el planeta como lo hicieron los indígenas, para que la humanidad evolucione. Escucharán más de esta historia, de la reescritura de esta narrativa, donde ninguna religión del planeta le dio credibilidad siquiera. Será duro, queridos, pero se puede hacer. Y voy a decirles a los que están inmersos en sus sistemas de creencias que no tienen que erradicarlos para aceptar este principio de que la Tierra, Gaia, es una gran parte de su espiritualidad. Pueden sumar esto a su creencia. Eso no disminuirá el amor que sienten por el Creador o lo que crean en este planeta. Esto no cambia ni reescribe su fe, le añade un significado más profundo. La mayoría de los Maestros, incluso los de las religiones que mencionó mi socio, conocían estas cosas. Se presentaban en campos verdes y trabajaban con animales, sabían de todas estas cosas. Pero va a ser necesario en una conferencia o en una Cumbre como esta que se enseñen estas cosas. Conociendo el importante rol de la Tierra, es necesario y vital ascender al siguiente nivel. Y todavía hay algunos que no entienden por qué. “No entiendo. ¿Por qué? Podemos vivir espiritualmente sin necesidad de eso”. ¿De veras? Ustedes no saben lo que no saben, queridos. Les daré un ejemplo. Imagínense decirle a un indígena: “Quiero que mantengas tus históricas creencias, pero elimina la parte de la Tierra”. (Kryon se ríe) Él los miraría y sonreiría ante su ingenuidad. El podría devolverles la mirada y decirles: “Está bien. Tomen al mejor chef francés que conozcan, a todo un grupo de ellos. Reúnanlos y díganles que deseamos que cocinen lo de siempre, la comida más increíble y fina del mundo, sin utilizar el horno. ¡Comiencen, muchachos!” Así entenderán de qué estamos hablando. El horno cocina todo, la sutileza de su temperatura, el sabor que genera, hace que no solo sea necesario, no se puede lograr sin él. Este planeta va a necesitar esto.

Quiero revelarles una profunda verdad de la que tal vez estén conscientes o no, un momento para sacar sus propias conclusiones. Durante treinta años anunciamos que el cambio se avecina. Los indígenas hubieran dicho lo mismo. La precesión de los equinoccios, el bamboleo de la Tierra, ha creado un potencial cambio de conciencia en el planeta. Se lo llama El Gran Cambio. Muchos están hablando de ello y no son conscientes de que el planeta es el generador. ¿Pueden ver cómo está cambiando el mundo? La conciencia está despertando. Ahora atemos cabos. ¿Qué acabo de decir que ocurrió? Que la absoluta conciencia no está allí. Falta la conciencia absoluta y necesitamos que esté ahí. El planeta está conectado al despertar de su conciencia. La precesión de los equinoccios es planetaria. Gaia está moviéndose. Tiene que ver con el movimiento no solo de eso, sino de las estrellas, de las posesiones. Queridos, ¿comprenden lo que digo? El cambio de conciencia empezó con el planeta. Quiero que empiecen a entender y saquen sus propias conclusiones. A los que son muy nuevos en esto, les pido, les suplico, suspendan todo por un momento y pregúntense si podría ser así. ¿Es posible que nos hayamos perdido esto? ¿Qué la sociedad moderna lo haya ignorado? Por eso no hay culpas, nunca les enseñaron esto. No hubo ningún sabio que les dijera: “¿Se dieron cuenta que se perdieron lo más importante que los unía con el Creador, con su religión, con Dios? ¡Se lo perdieron! Pero aquí estamos, en una Cumbre, todos nosotros, diciéndoles lo que podrían tener. Ese es el objetivo del día de hoy. Y la segunda parte es que será mejor que empiecen y vayan a descubrirlo por sí mismos. Y si necesitan ayuda, los indígenas siguen aquí. No les hablarán de sus ceremonias, les hablarán de las conexiones del corazón, de lo que el planeta les dio y puede darles todavía viviendo en esas ciudades modernas. Tiene que ver con el vínculo, el amor, la conexión y el honor. Y cuando empiecen a vivirlo, su vida cambiará. Esa pieza restante comenzará a trabajar. Les toca encender el horno y volar. Este es el mensaje que se necesita ahora. Realmente es lo que más se necesita en estos tiempos, queridos.

Este planeta tiene la mano extendida y está diciendo: “Es hora de que me conozcan. Es hora de que entiendan la conexión que siempre tuve con ustedes, y que ustedes nunca tuvieron conmigo. Y en ello conocerán al mejor amigo que han tenido, al mejor amigo que nunca tuvieron.

Soy Kryon, enamorado de la humanidad.
Y así es.



Fuente:   www.trabajadoresdelaluz.com