Emmanuel - Recordad, esto es una escuela.


Las misiones kármicas van encaminadas al perdón de uno mismo y a la auto-realización.

No os perdéis y andáis errantes por una negación deliberada, sino sólo por miedo, por ignorancia, y con el único objeto de descubrir dónde no está la salvación.
Habéis quedado confundidos y separados de vuestra relación consciente con Dios.

Encontrad vuestro camino de regreso a través del laberinto de vuestra experiencia humana y descubriréis que la puerta está abierta y que la Luz está allí.

En las situaciones en las que uno se permite voluntariamente el acto de hacer daño al prójimo, lo cual supone una negación de Dios, el alma se da cuenta.

De un modo u otro se ve obligada a llegar a una comprensión del hecho.

Quizá le lleve varias vidas, quizá le lleve sólo un instante.

Tal vez os decepcione saber que no cambiáis radicalmente tras haber tenido la experiencia de las realidades kármicas para trascender vuestro mundo.

Seguís siendo vuestro amado yo.

Personalmente, lo encuentro agradable y curioso.

Ese yo que profanáis y despreciáis, ponéis en duda, y juzgáis y halláis culpable, es el mismo yo que regresará al Hogar con vosotros.


¿Qué pasa con almas como las de Hitler o Stalin?

Cuando decís «almas como las de Hitler o Stalin», os aseguro que no conocéis su alma.

Podéis hablar de unos hombres como Hitler o Stalin, pero no podéis hablar de su Ser Divino total.

La conciencia humana necesita una retribución, necesita justicia.

Son muchas las cosas que la mente humana no puede entender.

No podéis obligaros a perdonar y amar a alguien que, al parecer, ha causado tantos sufrimientos.

Desde vuestro punto de vista es imperdonable.

Efectivamente, es enorme la cantidad de crecimiento que debe producirse en las almas, y no sólo en esas dos, sino en todos los que son crueles, en todos los que abusan, matan, son egoístas, ambiciosos o insensibles.

Es una cuestión de grado.

Dentro de cada uno hay una pequeña parte, en unos mayor y en otros menor, en la que habita el odio, en la que habita el racismo, en la que se oculta una voz que dice:

«Soy distinto y mejor que tú!»

Siempre que oigáis esa voz, estaréis hablando a aquello que en el mundo externo habéis considerado un Hitler.

Recordad, esto es una escuela.

Pero recordad también que algunas enseñanzas requieren ser escritas más allá de los cielos para ser escuchadas y entendidas.


¿Pasan todas las conciencias de las formas de materia más estáticas y simples hasta evolucionar y convertirse en otras más fluidas y complejas?

Los que han elegido el desvío, han elegido también la vía de retorno.

Ello implica la experiencia de muchos distintos niveles de conciencia.

Al expresarse la conciencia, forma materialmente lo que denomináis en vuestra tierra muchos niveles de conocimiento distintos.

Se trata siempre del viaje de regreso hacia la Unicidad.

Si una parte de la conciencia se siente mejor haciéndose fuerte como una roca o ligera como una brizna de hierba, ello no significa que quede limitada a esa forma.

Significa tan sólo que a una determinada parte de la conciencia le puede resultar más útil para sus propios intereses tener experiencia de esa breve relación con la realidad materializada concebida como objeto aparentemente inanimado.

Al mismo tiempo, la conciencia puede crearse a sí misma en otros niveles, incluido el de la existencia humana.

Cuando empezáis a encariñaros con la tierra, con el canto de un pájaro, la belleza de una flor, y sentís allí la unidad con Todo, Io que estáis haciendo es liberar parte de vuestra conciencia congelada para con ese amor recuperar la luz, que es vuestro ser esencial.

El sentido de unidad con todas las cosas terrenas constituye un buen indicio de que habéis llegado a integrar las partes que fueron evolucionando a través de las diversas experiencias.

Esto conduce al conocimiento total de la tierra, concebida como una sola cosa junto con vuestro ser.

Y literalmente lo es.


¿Evolucionan los animales?

¿Llegan a convertirse en personas?

Por supuesto!

La conciencia debe crear lo que es a partir de la posición de su propia existencia.

Cuando una conciencia se expande, crecerá hasta el punto en el que, trascendiendo su comprensión actual, puede penetrar en una sabiduría mayor.

La evolución no tiene fin.

Vosotros evolucionaréis hasta convertiros en seres mucho más brillantes, más hermosos y más sabios.


¿Puede uno adelantarse y graduarse en la carrera de la vida?

NO se pueden saltar los pasos El proceso necesarios. orgánico no lo permite.

Quedarían huecos en los que el temor, la duda y la falta de fe permanecerían al acecho, de modo que todo volvería a venirse abajo y estoy seguro de que no es eso Io que queréis.

Hallaréis vuestro camino y lo seguiréis hasta el final.

Al fin y al cabo, tampoco se está tan mal aquí.

¿No habéis venido a ver la hermosuray la fealdad, el amor y el odio, la luz y la oscuridad?

NO intentéis escapar.

Vuestro cometido es transformarlo, no evitarlo


Eh, Emmanuel!

¿Qué hora es?

Ahora!


Si somos eternos, ¿qué significa el tiempo?

Vosotros habláis de tiempo. Yo hablo de eternidad.

Y sin embargo todos hablamos de lo mismo, desde una perspectiva distinta de la conciencia.

El tiempo es un instrumento educativo.

El tiempo es un ingrediente imprescindible para la realidad física, pues da un sentido de la estructura, una energía positiva que contribuye a manteneros centrados y en relación con lo que ocurre en clase.

Todo lo que tiene por objeto mantener la atención en la zona requerida puede llamarse instrumento para el aprendizaje.

Cuando os hayáis graduado, no necesitaréis tiempo, pero hasta ese momento es imprescindible.

Liberaos de los límites de vuestro cuerpo físico y estaréis fuera del tiempo; sin embargo, seréis concientes de existir!

Aquí, donde ahora estáis, el tiempo lineal es una parte de vuestro entorno.

Cuando trascendéis el sentido del tiempo, según se mide en vuestro mundo, el tiempo deja de ser lineal y simplemente es.

Se reúne con la «es»-encia de todas las Cosas.

No diríais que no hay tiempo, sino que lo liberaríais de las ataduras conceptuales del movimiento progresivo o regresivo o de cualquier otra realidad que no sea la existencia eterna.


Extracto de El libro de Emmanuel
Transmitido por Pat Rodegast




Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
17  agosto del 2020