Solo los locos y los solitarios
pueden permitirse el lujo de ser ellos mismos
porque los solitarios no necesitan complacer a nadie
y a los locos no les importa ser comprendidos.
En mi experiencia,
la soledad te conduce a la contemplación
y la contemplación a la reflexión
y la reflexión a la introspección.
En un mundo que anestesia
a base de estímulos constantes,
elegir el camino de la soledad
es tachado de locura.
Qué curioso
que sea la soledad misma
la que la cura...