Ramtha - El Vacío. Conciencia y Energía crean la realidad.

LAS ENSEÑANZAS DE RAMTHA COMO UN SISTEMA
AUTÓNOMO DE PENSAMIENTO
LOS PILARES SEL SISTEMA DE PENSAMIENTO DE RAMTHA

El Vacío. 
Conciencia y Energía crean la realidad
«He aquí a Dios»
Hacer conocido lo desconocido

Las enseñanzas de Ramtha abarcan una gran cantidad de temas, sin embargo, todos ellos sirven para exponer los conceptos fundamentales de su propio sistema de pensamiento. En repetidas ocasiones, Ramtha ha recalcado que la totalidad de su mensaje podría expresarse con la frase «Tú eres Dios». Pero ¿cómo hemos de interpretar esta afirmación? Probablemente haya tantas definiciones de la palabra «Dios» como personas en la Tierra. A fin de comprender correctamente las enseñanzas de Ramtha, es crucial que tomemos conciencia tanto de nuestro propio concepto de Dios como de su contraste con la explicación y definición de Ramtha acerca de Dios y de la naturaleza de la realidad.

¿Cuál es la esencia de todas las cosas? ¿Cuál es su origen? ¿Cuál su naturaleza? ¿Cuál es su destino?

Para abordar estos interrogantes' Ramtha comienza con el concepto del Vacío. 

El Vacío es la fuente de la cual surgió todo lo que existe. Ramtha describe al Vacío como «una vasta nada materialmente, pero todas las cosas potencialmente». En el Vacío no hay nada, ni movimiento ni acción.

Muchas aproximaciones filosóficas al interrogante de Dios, incluyendo las teologías de las religiones monoteístas, han concebido a Dios como un ser omnisapiente, infinito, absoluto, trascendente e inmutable. En el sistema de Ramtha, los atributos de absoluto, infinito e inmutable son características del Vacío. El Vacío es autónomo, autosuficiente, está en un estado de reposo y de ausencia de necesidad. Aunque el Vacío se vea como una vastedad que lo contiene todo, en su estado original no posee conocimiento de sí mismo, ya que el conocimiento es una acción.

«Bien. Retrocedamos hasta antes de que hubiera un comienzo. ¿Puedes imaginarte esto? Si el tiempo, entonces, se basa en el concepto de que existe entre dos puntos de conciencia —¿me sigues filosóficamente?—, ¿qué era cuando no había dos puntos de conciencia? ¿Te puedes imaginar eso? Vamos, despierta. Ahora, si no había dos puntos de conciencia, no había nada. ¿Sabes lo que significa la palabra «nada»? No-cosa. ¿Puedes imaginarte una inmensidad de no-cosas? Bueno, existió, y sigue existiendo.

Entonces, esto es con lo que vas a tener un problema. Esta condición siempre existió. Eso es con lo que tienes problemas. No puedes imaginarte algo que existió que no era nada y que nunca tuvo su propio creador. Siempre existió. Eso es lo que desconcierta al cerebro amarillo.*

* El cerebro amarillo» es el nombre que da Ramtha a la neocorteza del cerebro, la morada del pensamiento analítico y emocional.


Siempre existió. Poderoso. Bueno, a esto lo llamamos —y quiero que lo escribas— el Vacío. El Vacío. Ahora quiero que escribas la definición del Vacío justo detrás. El Vacío es una vasta nada materialmente, todas las cosas potencialmente. Entonces, ¿te vuelves a tu vecino y lees la definición del Vacío? (...)

Ahora, llamamos entonces al Vacío una vasta nada materialmente, sin embargo, todas las cosas potencialmente. Vamos, principiantes, decidlo. Ahora, esto es lo que en los viejos tiempos de mi aparición aquí llamé el Principio Madre-Padre. Se llama el Principio Madre-Padre, el Vacío. También se lo llamó la Fuente. La Fuente. Ahora, hay un magnífico y brillante científico que llegó a un entendimiento del Vacío. Él lo llamó algo así como el éter, pero eso es incorrecto. Este científico —y se llama David Bohm— entendió que las partículas no viajan. No viajan; aparecen y reaparecen. ¡Qué concepto tan asombroso! ¿No hacen esto? Sí, aquí abajo lo hacen. (...) Él dijo que el Vacío pliega, enrolla, y desenrolla potenciales. Tiene razón.*

* Ramtha: Creando la realidad personal


El concepto de Dios como creador, «la primera causa» o «el motor inmóvil», que encontramos en la filosofía de Aristóteles y en la teología de Tomás de Aquino, es descrito por Ramtha en función del Vacío contemplándose y conociéndose a sí mismo. Este acto de contemplación representa un movimiento único en el Vacío, el cual originó un punto de conciencia y saber de sí mismo. A este punto de conciencia se lo llama Punto Cero, el Observador, la Conciencia Primaria, Conciencia y Energía , y Dios. Punto Cero lleva en sí la intención primordial de experimentar y hacer conocido aquello que es desconocido y que se encuentra en un estado de potencialidad dentro de la vastedad del Vacío. Esta es la base para la evolución. El Vacío contemplándose a sí mismo es la fuente y origen de la persona. La afirmación de Ramtha «Tú eres Dios» habla de la persona como el Observador, la encarnación de Punto Cero, y Conciencia y Energía creativas.

Para cumplir con su naturaleza de evolucionar y hacer conocido lo desconocido, Punto Cero imitó el acto de contemplación del Vacío. Al hacer esto, Punto Cero creó un punto de conciencia referencial que funcionó como un espejo a través del cual pudo tener conciencia de sí mismo. Ramtha se refiere a esta conciencia de reflejo como la Conciencia Secundaria. Punto Cero descansa en el seno del Vacío y no tiene límites en cuanto a lo que puede saber. El reflejo entre Punto Cero y la conciencia de reflejo genera un medio ambiente, un plano tangible de existencia en el tiempo y en el espacio. El Espíritu es el aspecto dinámico de Punto Cero; es la voluntad o la intención que desea saber y experimentar lo desconocido. La exploración de los potenciales del Vacío, llevada a cabo por Punto Cero y la conciencia de reflejo, generó siete niveles de conciencia y, en consecuencia, siete niveles de espacio y tiempo, o frecuencia. 

Este viaje y acto de creación, bajando por siete niveles de conciencia y energía, se llama «el viaje de la involución». La travesía de regreso a Dios y al Vacío se llama «el viaje de la evolución». El alma es diferente del espíritu; Ramtha se refiere al alma como el Libro de la Vida. El alma es quien registra todas las experiencias y la sabiduría que se han obtenido en el viaje de la involución y la evolución.

El conflicto del ser humano se expresa en función del olvido, la amnesia y la ignorancia de sus orígenes y de su destino. El viajero, o la Conciencia de Reflejo, se identificó tanto con el plano de existencia más denso y más lento, que olvidó su propia inmortalidad y divinidad. El ser humano se ha convertido en un extraño para sí mismo —para el Dios que vive dentro de nosotros y que es nosotros— y ha buscado ayuda, sentido y redención en una causa externa. Al hacer esto, la humanidad niega su propia divinidad y excluye cualquier posibilidad de liberarse de su condición actual.

Es importante observar que en el sistema de pensamiento de Ramtha, el mundo material —el plano de existencia más denso— y el cuerpo físico, jamás son considerados como indeseables, perversos o esencialmente malos. La interpretación dualista de la realidad que encontramos típicamente en las tradiciones gnósticas -—que recalca la lucha entre el bien y el mal, lo bueno y lo malo, la luz y la oscuridad, el pecado y la virtud— está básicamente excluida del sistema de pensamiento de Ramtha. Lo que se vuelve una situación indeseable es permanecer en un estado de ignorancia y negación de nuestra naturaleza y destino verdaderos. 

Es absurdo discutir por nuestras limitaciones, cuando somos nosotros, como conciencia y energía, quienes las hemos creado.

La Gran Obra es la aplicación práctica de las enseñanzas de Ramtha, donde la Persona tiene la oportunidad de conocerse a sí misma y alcanzar la iluminación. El sendero hacia la iluminación es el viaje de la evolución de regreso a Punto Cero. Al llevar a cabo esta tarea, la persona cumple el mandato de hacer conocido lo desconocido y entregar al Vacío su experiencia para que se convierta en sabiduría eterna.

«Entonces, de todo aquello que se llama el sistema solar y el espacio y las estrellas y las nebulosas y los telestars, ¿qué es el espacio? Lo importante no es lo que ves que deslumhra al ojo, sino aquello en lo que existe, la Nada. ¿Qué es eso? La Nada, el Vacío. 

¿Podría ser eso el progenitor de la luz y las constelaciones y los sistemas estelares y las nebulosas? Lo es. Se llama el Vacío. ¿Qué es el Vacío? Es aquello que existe sin tiempo, distancia ni espacio.

Ahora, la Escuela Antigua, entonces, se basa, no en una verdad nueva sino, literalmente, en aquello que se llama los cimientos del mundo: cómo llegó a existir el sistema solar y por qué, y quién eres tú con relación al sistema solar; cuál es tu camino, el camino del sistema solar; cuál es, en verdad, el significado del cosmos; por qué eres tan pequeño con respecto a la imagen más grande. Aprenderás eso en esta escuela. Y esta no es una verdad nueva; esta es una verdad antigua.

La escuela, entonces, está construida sobre una piedra angular. Piensa en la escuela como un edificio gigantesco, que no es nada que puedas ver, sino que es todo lo que sientes. Y la piedra angular de este edificio se llama conciencia y energía. Entonces, ¿qué dije?

Vuélvete a tu vecino y dile eso. Conciencia y energía: es la piedra angular de esta escuela. Conciencia y energía. ¿Sabes qué significan esas palabras? Un sueño con poder e intención; eso es lo que significan. Así que la escuela está construida empezando con esta piedra angular.

Y otra piedra angular es que tú eres Dios. Di eso. Más alto. Ahora, mira, no te quemaron vivo por decir eso, ¿no es así? Esto no es blasfemia. Esta es la Sagrada Escritura. Dilo de nuevo. Que así sea. Ahora, ese es un maravilloso lugar en donde estar, pero sí que implica algunas responsabilidades. Entonces la otra piedra angular es que tú eres Dios. ¿Y cuál es la otra piedra que forma el cuadrado?

Conciencia y energía crean la realidad. Tú eres Dios.

¿Y cual es la otra piedra si vamos a cuadrar esto? La otra piedra es que tu vida es para hacer que evolucione lo que ya se conoce. Di eso. De nuevo.

Ahora, ¿significa eso que debes ser igual que un entrometido y dirigirte a tu vecino y hacer que evolucione su vida? ¿Es así? Significa que te ocupes de tu propio destino. Tu propio destino es tu vida. Y tienes que ver lo que creaste, a lo que estas adherido emocionalmente, adueñarte de esa emoción, y seguir adelante creando nuevos paradigmas de vida. Y si haces eso, nunca morirás; no acabarás en el cementerio. Así que cuanto más creas, más joven te vuelves. Cuánto más joven te vuelves, más viejo te vuelves. Entonces, ¿es posible que nunca se te acaben las ideas? Sí. ¿Te vuelves a tu vecino y le dices eso? Vamos. Vamos. Queremos esta manifestación. Vamos. (...)

Y la evidencia es la verdad que dice que ni siquiera has empezado a soñar tus sueños más grandiosos o a vivirlos. ¿Y cómo sabemos eso? Porque observa esto: usas menos de una décima parte de este cerebro; menos de un décimo.»*

* Ramtha: Creando la Realidad Personal


Todas las disciplinas de la Gran Obra diseñadas por Ramtha, y que él utiliza para iniciar a sus estudiantes en las enseñanzas, siguen el modelo —y en cierto sentido lo imitan— del proceso de contemplarse a sí mismo experimentado por el Vacío, el cual dio origen a Conciencia y Energía, las que a su vez crean la naturaleza de la realidad.

En conclusión, los cuatro pilares o piedras angulares de la filosofía de Ramtha son: el concepto del Vacío, Conciencia y Energía crean los siete niveles de la realidad, la afirmación «Tú eres Dios», y el mandato de hacer conocido lo desconocido. En las tradiciones antiguas pueden encontrarse numerosos indicios del pensamiento de Ramtha, aunque en la mayoría de los casos, todo lo que queda son débiles ecos que apenas han sobrevivido el paso del tiempo y la pérdida de un contexto apropiado para su interpretación. 

Algunas de estas tradiciones son: las filosofías de los antiguos egipcios y el faraón Akhenatón; la descripción de Buda de sí mismocomo «el que está despierto»; el entendimiento de Sócrates acerca de la virtud y la inmortalidad del alma; el concepto de las formas universales de Platón; la vida y las enseñanzas de Yeshua ben Joseph*; las obras del apóstol Santo Tomás, el Himno de la Perla; el Himno al Verbo Divino en el Evangelio según San Juan; Apolonio de Tyanna; Orígenes; los cataros y los albigenses; Francisco de Asís; los místicos judíos y cristianos; el dibujo de San Juan de la Cruz Subida al Monte Carmelo, donde la cumbre se ubica en la parte superior de la cabeza del cuerpo humano; las obras de arte de diversos artistas como Miguel Ángel y Leonardo da Vinci; los escritos y las experiencias místicas de Teresa de Ávila; las obras de Fray Luis de León; los humanistas del movimiento renacentista en Europa; los rosacruces, y los maestros del Lejano Oriente, entre otros.

* Ramtha se refiere a Jesucristo con el nombre de Yeshua ven Joseph, siguiendo la tradición Finalmente, es importante observar que un elemento común en la exposición que hace Ramtha de sus enseñanzas es la reinterpretación del entendimiento tradicional de la vida y enseñanzas de Yeshua ben Joseph.26 Él cita esta fuente en repetidas ocasiones, pero arrojando una nueva luz y discernimiento sobre las enseñanzas de Jesús. La particular interpretación de Ramtha acerca de Jesús dista de ser una manipulación arbitraria de la información. Siempre que Ramtha se desvía de la interpretación tradicional de Jesús y sus enseñanzas, proporciona una evidencia sustancial para sus hipótesis y afirmaciones.

Quisiéramos finalizar este estudio preliminar haciendo un paralelo entre el Padrenuestro —la oración de Jesús que se encuentra en los Evangelios Sinópticos— y la oración de Ramtha al Espíritu, entre las cuales existe una gran similitud. El Padrenuestro es la oración que se usa tradicionalmente en el cristianismo para dirigirse a Dios; se considera que esta oración es representativa de las enseñanzas de Jesús. Por su parte, la oración de Ramtha al Espíritu ofrece a sus estudiantes los medios para promulgar y proclamar las afirmaciones básicas de sus enseñanzas. Esta oración es una iniciación poderosa en los misterios sagrados de la creación, el espíritu y el viaje de la involución y la evolución de regreso a Dios.

Las palabras de la oración de Ramtha que presentan un claro paralelo con la oración de Jesús podrían servir como una clave para la interpretación del mensaje de Jesús. Cuando aplicamos el entendimiento de Ramtha de esas palabras a las enseñanzas de Jesús, su mensaje concuerda notablemente con la obra atribuida al apóstol Tomás en la colección de escritos de Nag Hammadi.*

* Conjunto de manuscritos, en su mayoría de origen gnóstico, descubiertos en 1945 cerca de Nag Hammadi (Egipto). Estos manuscritos son la colección mas completa y mejor preservada de varios evangelios y escritos teológicos considerados por la Iglesia Católica como apócrifos, entre los que merece especial atención el Evangelio de Tomás, uno de los doce apóstoles. Este documento —mencionado por los Padres de la Iglesia, pero excluido del canon ortodoxo— es una colección de 114 dichos de Jesús recogidos por Tomás.


Esto es importante, ya que se considera que los textos de Tomás datan de mediados del siglo 1, una fecha anterior al Evangelio de Juan y a los tres Evangelios Sinópticos*.

* «Discutiré, en primer lugar, que desde ningún punto de vista histórico significativo puede considerarse al documento de Tomás como gnóstico. Cualquiera haya sido función del Apócrifo de Juan, el Origen del Mundo, Eugnostos, Pistis Sophia, etc., el Evangelio de Tomás es algo diferente. Para ver un típico evangelio de dichos gnósticos, habría que dirigirse al Evangelio de Felipe. En segundo lugar, demostraré que, sin ser un documento sistemático, Tomás contiene, sin embargo, un conjunto inteligible de ideas, las que mayoría están tomadas de la sabiduría judía y de las tradiciones apocalípticas. Finalmente ubicaré a Tomás dentro del contexto de la Iglesia primitiva.


Paralelo entre la Oración de Jesús al Padre y la Oración de Ramtha al Espíritu


EL PADRE NUESTRO

Padre nuestro, que estás en el Cielo,
santificado sea tu Nombre,
venga tu Reino,
hágase tu voluntad así en la Tierra como en el Cielo.
Danos hoy el pan que nos corresponde;
y perdona nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.
Y no nos dejes caer en la tentación,
sino líbranos, del Maligno.(1)


ORACIÓN DE RAMTHA

Oh, mi amado Espíritu, mi Espíritu poderoso, el Omnipotente,
tú que estás lleno del poder del Cielo y de la Tierra, lléname con tu poder.
Oh, mi Espíritu, lléname con tu Reino manifiesto;
que yo sea un receptáculo para revelar aquello que es invisible en el Cielo, para dominar aquello que es visible en el Tierra.
Manifiesta para mí mi alimento diario, de modo que yo viva para reconocer mi culpa, mi duda, mi pesar, y, entonces, ser consciente de la verdad.
Oh, poderoso Espíritu, no permitas que yo sea tentado.
Protégeme de todo lo que pueda persuadirme.
Y manifiesta a través de mí al Dios divino.
Así lo digo yo.
Que así sea.
Por la vida.(2)


(1) Mateo 6, 9-13 La Biblia Latinoamericana, CD-ROM, Buenos Aires, Ed. San Pablo, 1995.

(2) Ramtha: DlALOGUESA> Cinta N° 327.09, Our Omnipotent Spirit: Direct Line to the Power of Manifestation (Nuestro espíritu omnipotente: la línea directa hacia el poder de la manifestación 23 de febrero de 1996



«Ahora, quiero que sepas también que si sientes una ligera repulsión hacia esta oración, se debe, muy probablemente, a un recuerdo profundo y consciente de la religión y tu aversión hacia ella. Pero escúchame: esto se conocía en tiempos de la antigüedad. Los grandes, grandes maestros y Cristos de la Tierra enviaron este mensaje a la gente. Fragmentos de los misterios sagrados fueron robados, y a su alrededor se creó una religión en la que se produjo una gran farsa. Y la gran farsa es que la religión se convirtió en el custodio de Dios y, en verdad, en último término, tenía poder sobre las almas de todos sus feligreses. Es más, tomó este conocimiento y dijo que sólo a través de Cristo podía suceder esto. Eso no es verdad. Es más, está hablando de una deidad de la cual ha enseñando que existe en forma ajena a la gente. Eso no es verdad.

Observa que en esta plegaria estamos diciendo: .Le devolvemos a Dios el plan y el poder que Dios nos dio, que es donde deben estar. Estamos invocando a la deidad y a su poder dentro de nosotros. Somos la proyección de esa deidad; se nos ha dado el poder de crear. Cuando la invocamos, lo hacemos desde nuestro propio lugar sublime y profundo. Esta no es una oración religiosa; es la plegaria invocadora del Espíritu individual, del Dios Todopoderoso; Dios Todopoderoso.»*

* Ramtha DlALOGUES™. Cinta N° 327.09, Our Omnipotent Spirit: Direct Line to the Power of Manifestation (Nuestro espíritu omnipotente: la línea directa hacia el poder de la manifestación=, 23 de febrero de 1996.


Es una colección de dichos se utilizaba para la instrucción de los cristianos recién bautizados. Parece reflejar una forma Primitiva de la prédica joánica y, probablemente, proceda de la misma época que el Documento Q (fuente de dichos de la que, según muchos estudiosos, Mateo y Lucas tomaron gran parte de su material). El documento de Tomás debería fecharse entre los años 50 y 70 d.C.

Si se aceptan estas conclusiones, entonces el Evangelio de Tomás puede ocupar un lugar dentro de la erudición y del autoconocimiento cristiano; lugar que ahora se le niega. Me preocupa menos que cualquiera de mis conclusiones específicas acerca de Tomás sean aceptadas, que el hecho de que el texto se ubique a mediados del siglo I, pues sólo entonces se reabrirá el interrogante del significado de Tomás en la historia cristiana.» Stevan L.Davies, The Cospel of Thomas and Christian Wisdom (El Evangelio de Tomás y la Sabiduría Cristiana), New York: Seabury Press, 1983, 2.


La oración de Ramtha contiene los elementos básicos de su filosofía. La plegaria está dirigida a nuestro espíritu personal, al aspecto dinámico de Punto Cero, al Dios interior de la persona, y no a un ser que está fuera de nosotros y que nos trasciende. Nuestro espíritu personal se define como el Todopoderoso y el Omnipotente, el hijo del mismo Vacío. El concepto del Cielo se interpreta en relación al océano de potenciales del Vacío; la palabra «Tierra» se utiliza en referencia a la manifestación y expresión de esos potenciales. El Cielo es el principio creador de conciencia y energía, y la Tierra es su séptima expresión y manifestación.

La personalidad humana —la conciencia secundaria o conciencia de reflejo— es quien está dirigiendo la plegaria al Observador o conciencia primaria. Expresa su deseo de convertirse en un receptáculo de los potenciales invisibles, de hacer conocido lo desconocido. El valor de alimentar el cuerpo físico y sustentar una forma de vida humana reside a la oportunidad de tomar conciencia de nuestra culpa, duda, y pesar. En otras palabras, lo que es importante en la vida es liberar y apoderarse de la verdad de todas las emociones humanas que hacen que continuemos repitiendo las experiencias de nuestro pasado. El alma proporciona la lista de lo que aún necesita ser resuelto en nuestras vidas para poder continuar nuestro viaje de la evolución de regreso a Dios. La meta de la oración es alcanzar la unidad con lo divino, obtener la iluminación. Manifesfestar al Dios divino a través del individuo es convertirse en Dios-mujer/Dios-hombre realizados, un ser inmortal que ya no está limitado por el tiempo o el espacio. 

La frase que cierra la plegaría la distingue de ser una mera petición que ha de ser concedida por una fuente externa o un ser superior Esta oración es, antes bien, un poderoso mandato de manifestación y un fuerte reconocimiento del poder creador del ser humano como Dios y Observador.

Las enseñanzas de Ramtha nos ofrecen una perspectiva única desde la cual contemplar el misterio de la vida; nos brindan un marco en el que los interrogantes que la filosofía, la ciencia y la religión no han respondido, encuentran un nuevo significado. Estas enseñanzas pueden llevar el alcance de la experiencia humana mucho más allá de los limites que, hasta el día de hoy, han establecido la ciencia y las diversas religiones del mundo. El sistema de pensamiento de Ramtha no es ni una religión ni una interpretación filosófica de la realidad, es la verdad que se obtuvo se comprobó a través de la experiencia de un miembro de la raza humana. En este sentido, es el conocimiento de Ramtha, la ciencia de Ramtha. Y ahora que el sendero ha sido transitado, las puertas están abiertas para todos aquellos que deseen explorarlo y realizar su propio camino hacia lo desconocido.


RAMTHA - Extracto de GUIA DEL INICIADO PARA CREAR LA REALIDAD




Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
09 de Diciembre 2018