Cuando nos acercamos a cualquier cambio importante en la vida, como ocurre en nuestro cumpleaños o el Año Nuevo, observamos lo que hemos hecho en el pasado e intentamos encontrar nuevas formas de hacer las cosas en el futuro.
Establecemos objetivos, hacemos promesas, juramos que las cosas serán diferentes y luego, lo que pensamos que sería una enorme transformación, se convierte en humo.
¿Que pasó? No utilizamos nuestras herramientas de energía creativa y no nos hicimos las preguntas esenciales que nos ayudarían a cumplir nuestros objetivos y promesas.
Si te chocó ver la palabra "magistral" en el título de este artículo, te gustará saber que también hablaremos acerca de la creatividad. Establecemos objetivos, hacemos promesas, juramos que las cosas serán diferentes y luego, lo que pensamos que sería una enorme transformación, se convierte en humo.
¿Que pasó? No utilizamos nuestras herramientas de energía creativa y no nos hicimos las preguntas esenciales que nos ayudarían a cumplir nuestros objetivos y promesas.
Puedes pensar que no eres un maestro porque no te crees lo bastante inteligente, lo bastante bueno o lo suficientemente seguro. Y puedes pensar que no eres creativo porque no sabes dibujar, pintar o tocar música. ¿Sientes que eres congruente? Ser congruente no significa ser bondadoso, inteligente, rápido, tener talento artístico, ni ser lo bastante bueno en algo. Se trata de ser tú mismo, tu yo único, poderoso y especial.
Podemos elegir entre infinidad de opciones. La maestría dice: "Sé lo que es correcto y lo mejor para mí" y no duda en tomar ese camino.
La mayor parte de nuestras limitaciones llegan cuando dudamos de nuestras habilidades. Solemos asociar la maestría con la especialización en algo y relacionamos la creatividad con algún tipo de talento artístico. Pero son supuestos erróneos.
La maestría es un estado del ser; la creatividad es nuestra habilidad para usar la intención y llevar la energía a la forma. Creamos materia en función de lo que nos importa: "Lo que importa se convierte en materia", como dije en mi artículo de Enero de 2014. http://trabajadoresdelaluz.
La creatividad es el estado que nos permite crear. ¿Sabes que estamos en un estado continuo de creatividad? En todo momento estamos creando nuestra realidad, que consiste en materializar la energía en la forma. Tómate un instante para mirar a tu alrededor, observar tu vida y lo que hay en ella, con todas sus circunstancias: verás la creatividad en acción. Has creado todo eso trayendo energía a la forma.
Pero puede que no te guste lo que has creado. Recuerda que la energía no juzga ni adivina nuestras intenciones, sean estas conscientes o inconscientes, si trabajan a nuestro favor o nos auto sabotean (lo que puede ser positivo, dependiendo de las circunstancias), o si no sabemos lo que hacemos.
De hecho, la energía nos responde al 100% , sin pausa ni cuestionamiento de la validez de nuestras intenciones.
El Universo siempre nos ve como maestros infinitamente poderosos y creativos, porque eso es lo que somos. Una cosa es lo que creamos, y otra muy diferente es si eso nos gusta o no.
¿Cómo podemos fusionar ambas para que nos guste lo que creamos?
Reconociendo nuestra creatividad inherente y nuestro nivel actual de maestría para centrarnos en crear congruencia energética en todo lo que hagamos. La energía con la que creamos, lo que creamos y cómo lo experimentamos deben estar alineados e integrados entre sí. Si lo logramos, llegaremos más allá de la totalidad y la plenitud "de 360 ??grados".
Eres un maestro, eres creativo y te esfuerzas constantemente por crear congruencia y flujo en tu vida. Los desafíos no aparecen porque seas imperfecto, sino porque estás creando algo con lo que no estás alineado, con lo que no estás en integridad, porque no has utilizado todo tu poder para crear o estás dudando de tus capacidades.
Lo que importa se convierte en materia.
La pregunta que debemos hacernos es: "¿Qué me importaba cuando creé esto?". Porque 'lo que importa se convierte en materia'. Incluso si hoy crees que una decisión pasada fue un gran error, un día fue lo suficientemente importante como para que crearas algo a partir de ella. Permanece en el momento presente, donde estás respirando, y céntrate en la maestría y la creatividad de hoy.
Usa el pasado como compost para las semillas del futuro y crea nuevas experiencias en la materia centrándote en lo que ahora te importa, en lo que deseas ver reflejado en tu realidad y el flujo de energía en el que deseas estar.
por Jennifer Hoffman
http://enlighteninglife.com
11 de Diciembre 2018
Traducción: Rosa García
http://www.manantialcaduceo.
Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
01
de Enero 2019