Hacer zapping con la tostadora.

Queridos amigos: no me pregunten por qué los autores eligieron este título para el artículo. Es parte de un libro que escribieron Jim Self y Roxane Burnett, de Mastering Alchemy.
El asunto es divertido pero no le falta verdad, debo decir que yo misma he tenido mis "dimes y diretes" con los aparatos, como eso de entrar a la oficina, prender la luz y que explote la lamparita del techo.
Ojalá les guste y les resulte útil...
Afectuosos saludos de Cris
-.-.-
HACER ZAPPING CON LA TOSTADORA

Fragmento del Libro El Espíritu Importa: Herramientas Realistas para una Vida Animada, de Jim Self y Roxane Burnett

Hace años yo compartía una oficina muy pequeña con mi asistente Dave. Dave solía empezar su día con un humor horrible y hacia las 11 a.m. estaba insultando y demostrando su frustración. Dave también decía tener "síndrome de colon irritable" (probablemente solo era una coincidencia). Durante sus mañanas de desequilibrio emocional, su computadora también parecía funcionar mal, lo que se sumaba a la frustración de Dave. La relación hombre/máquina se intensificaba y aumentaba hasta que la máquina eventualmente se imponía y colapsaba completamente.

Tal vez tú hayas experimentado que un grabador no graba la conferencia aun cuando lo probaste antes del evento. Luego están las lámparas, reemplazadas recientemente, que explotan, o la impresora que se atasca repetidamente justo cuando hay que cumplir un plazo de entrega. Los aparatos eléctricos son sensibles a los impulsos eléctricos, a veces sumamente sensibles. Cuando un aparato eléctrico está cargado y funcionando a una frecuencia más alta que lo usual, otros aparatos eléctricos cercanos aumentan su frecuencia en un intento de entrelazarse con él o corresponderle. En otras palabras, como un diapasón, un aparato eléctrico que está vibrando más fuerte puede influir sobre los otros en su cercanía para que también vibren a la misma tasa o similar.

Esta correspondencia vibratoria también ocurre con los aparatos eléctricos que llamamos personas. ¿Alguna vez fuiste a una reunión y notaste quién dominaba la energía y cómo lo hacía? Si hay un participante que desafina mucho y no sintoniza con los otros y está lanzando sus opiniones e ideas con fuerza hacia el grupo, algunos miembros de la reunión probablemente se correspondan con él. Lo que empezó como una reunión productiva rápidamente se transforma en una sesión de quejas o en un silencio espeso e incómodo. Los participantes pasan desde un equilibrio personal al desequilibrio, en cuanto corresponden con el diapasón. Todo es energía en movimiento. Irritarse por esta fuerte personalidad también cuenta como "corresponder", porque uno abandona su propio estado de equilibrio. Uno es afectado por esa energía y entra en un estado personal de desequilibrio.

Recientemente yo disfrutaba de una cena en un restaurant en Spokane cuando observé una mesa cercana de mujeres cenando juntas. Las seis damas evidentemente estaban disfrutando de la comida, de la conversación, y de estar juntas. Estaban bien complementadas y lo estaban pasando muy bien. Flirteaban con el mozo, compartían los platos, y reían sin inhibiciones. Una mujer en particular parecía contar las mejores historias y chistes, y las otras frecuentemente le cedían la palabra. Ella daba el tono de la reunión. A medida que la cena proseguía, observé que cambiaba el humor de la fiesta. Aunque yo no oía su conversación, las voces se hicieron más bajas y menos entusiastas. La líder hablaba sobre un tema de preocupación y frustración. Ella, como un diapasón, afectaba a las otras que se acomodaban a ella. Ahora estas mujeres picoteaban la comida, miraban a la distancia y fruncían el ceño. Llegué a oir una que otra palabra y ellas iban de la ansiedad a la insatisfacción, la seriedad y la aflicción. Dos de las muj
eres estaban incluso en un debate emocional. El diapasón más fuerte establecía el tono de la fiesta, y la fiesta cambió la energía para corresponderle a ella. Todas dejaron de pasarlo bien.

Estamos bien entrenados en empatizar y corresponder con otros. Cuando estamos en una situación cargada, o bien nos adecuamos (y discutimos o nos quejamos junto con los demás) o dejamos la sala. La mayoría de los aparatos eléctricos no pueden levantarse e irse, de modo que tienden a corresponder al aparato eléctrico con carga más fuerte (tú) y a funcionar mal de alguna manera. Todo es energía y todo busca su equilibrio. Igual que la tostadora que solo quema las tostadas cuando estás apurado y muy hambriento.

Eso hacía también la computadora de Dave. Se adecuaba a su alta carga emocional y simplemente le mostraba que estaba fuera de equilibrio en su propio campo electromagnético. Sin embargo, Dave nunca entendió este hecho, y siguió culpando a la computadora por su frustración. De hecho, más tarde supe que él ya se quejaba de la computadora incluso antes de llegar al trabajo, preparándose para la desilusión y el enojo, que siempre se presentaban obedientemente. 


Observar la Energía

Cuando un aparato eléctrico empieza a funcionar mal en tu entorno, detente, mira y escucha. ¿Cuál fuente de energía dominante y desequilibrada podría estar causando este efecto? ¿Hay algún humano involucrado? ¿En qué condición está el humano? ¿Está equilibrado y alineado en su campo de energía o no? Si eres tú el que está operando el aparato, evalúa tu alineación y equilibrio. Ese aparato simplemente se está acomodando al operador, o al pulso eléctrico más fuerte en el entorno. 


Qué hacer si descubres que en realidad eres tú el que está fuera de equilibrio: 

1. Simplemente haz una pausa, toma una siesta o haz una caminata. Apártate físicamente del equipo hasta que recuperes tu equilibrio y alineación.

2. Si es inconveniente distraerte con alguna actividad que puedas disfrutar más, puedes recuperar tu equilibrio simplemente yendo a la sala de toilettes de la empresa y sentándote un rato. Esto también funciona en tu mismo escritorio; cierra los ojos brevemente y aparta tu silla, o gírala como para crear un poco de distancia entre el equipo que se comporta mal y tú.

3. Comprueba tu Cordón de Arraigo (N.T. cable a tierra, una de las herramientas enseñadas en Mastering Alchemy). Asegúrate de que está todavía allí. Podrías cortar el viejo y poner uno nuevo. Dale la orden de atraer magnéticamente cualquier energía o actitud desequilibrada que esté en tu experiencia en el momento. 

4. Toma nota de la emoción o los sentimientos que pulsan en tu mente y tu cuerpo. Con tu mano imaginaria, toma un poco de lo que está corriendo por allí y tíralo hacia abajo por tu cable a tierra.

5. Piensa intencionalmente o recuerda algo que te haga sentir mejor. Elige algo que no tenga nada que ver con la situación actual. Cuando tú giras y reorientas tu pensamiento, también girarán tu humor, tu energía, y las experiencias resultantes.

6. Permanece en el Centro de tu Cabeza, visualiza tu Cordón de Arraigo conectado al equipo. Ordénale soltar cualquier energía que esté fuera de equilibrio.


Te garantizo que si le dedicas estos pocos momentos valiosos, la computadora y el resto de tu día funcionarán con facilidad.


Traducción: M. Cristina Cáffaro 
www.traduccionesparaelcamino.blogspot.com.ar




Fuente:
www.trabajadoresdelaluz.com
17 de Enero 2019