«La muerte no es una regla necesaria en este reino. Es mucho más fácil llevarte el cuerpo contigo, entonces no tienes que nacer de nuevo a través del canal del nacimiento en una conciencia que, lamentablemente, no acepta tu memoria."
Ramtha
Estudiante: Recientemente me he dado cuenta de que voy a tener un bebé, y me gustaría saber, antes que nada, por qué este bebé eligió venir a mí, y cómo elegimos a nuestros padres.
Ramtha
Estudiante: Recientemente me he dado cuenta de que voy a tener un bebé, y me gustaría saber, antes que nada, por qué este bebé eligió venir a mí, y cómo elegimos a nuestros padres.
Ramtha:
¿Cómo elige cada uno a sus padres para tener un vehículo de expresión? Hay
muchas razones, muchas respuestas. Pero todos los que se han ido de este plano
y quieren volver a este nivel, están esperando a entidades que vayan a tener
niños. Todos aquellos que tuvieron descendencia en vidas pasadas, siempre
poseen patrones genéticos de vida —lo que tú llamas padres— a través de los
cuales pueden volver.
La mayoría elegirá padres que le son familiares, entidades que han sido sus padres o sus hijos en otras vidas. Sin embargo, hay entidades que eligen padres que no conocen sólo porque les proveen de un vehículo a través del cual expresarse en este plano. Para algunos, muchas veces no hay un vehículo través del cual venir cuando quieren regresar, y tal vez tienen que esperar cientos de años hasta que encuentran disponible una encarnación adecuada para ellos.
Nadie es realmente el padre o la madre de ningún otro. Todos somos hijos e hijas del principio Madre/Padre de la vida llamado Dios. Todos aquí somos hermanos y hermanas uno del otro. Tus hijos y tus padres son en realidad tus hermanos, y partes iguales de la mente de Dios.
Cada entidad sabe antes de venir aquí que no está volviendo para ser la más bella, el más rico o el más desgraciado de los pobres. Vuelve aquí porque quiere vivir aquí y emprender el aprendizaje emocional de este nivel, para obtener entendimientos emocionales que quiere satisfacer dentro de su ser. Ese es el verdadero tesoro de las experiencias de tu vida, tanto aquí como en otros planos o dimensiones, pues eso es lo único que permanece contigo a través de la eternidad.
La entidad que te ha elegido a ti, maestra, fue lo que llamas el padre del padre de tu padre. Va a volver a través del linaje que él empezó hace más de un siglo. Tu deseo de engendrar hermanos le permite su regreso, porque ahora tiene un vehículo a través del cual poder volver. Esta entidad espera «en fila», por decirlo de alguna manera, el fruto que vas a traer. Hay muchas entidades en esta audiencia que tienen entidades a su alrededor, en su campo luminoso, que están ahí «esperando en la fila» a que ocurra la concepción.
Estudiante: ¿Quiere decir eso que, si es el padre del padre de mi padre, es un muchacho?
Ramtha: Efectivamente. ¿Te parece bien?
Estudiante: Oh, sí ¡Muchísimo! Ramtha, tengo otra pregunta. ¿Siempre tenemos que atravesar el canal del nacimiento para volver aquí?
Ramtha: Para contestar tu pregunta, maestra, deseo que entiendas que este es el plano de la percepción tridimensional. Es el plano donde el pensamiento es visible en la forma tridimensional llamada materia. Este plano es la densidad de la materia porque el pensamiento se ha extendido hasta una frecuencia vibratoria llamada luz, que luego se ha reducido para convertirse en electrum, del electrum pasar a materia sólida y de la materia sólida convertirse en la solidez de este plano. Por lo tanto, la materia de este plano es luz cuya frecuencia vibratoria se ha reducido hasta tomar su forma más densa.
Para que todas las cosas tengan aquí la misma densidad tienen que vibrar en la misma frecuencia. Por lo tanto, tu cuerpo está vibrando en la misma frecuencia que la silla en que te sientas. Este nivel existe para ti porque los sentidos de tu cuerpo han sido diseñados para percibir las frecuencias de luz más lentas, llamadas materia.
Como tú eres, en esencia, una energía de luz cuya frecuencia vibratoria es mayor que la densidad de la materia, si no poseyeras un cuerpo material, pasarías a través de la materia de este plano. Por eso el cuerpo es lo que te permite, a través de su densidad y sus órganos sensoriales, percibir, experimentar, e interactuar con la materia de este plano.
Por lo tanto, si deseas ser parte de esta frecuencia, debes habitar y formar parte de un cuerpo manifestado. Una manera de poseer un cuerpo es nacer a través del canal del nacimiento. La única otra manera de tener un cuerpo para experimentar este plano es: nacer a través del canal del nacimiento, conservar totalmente la integridad del Yo, y activar la totalidad del órgano llamado cerebro. Una vez que has abierto plenamente la capacidad de tu cerebro, puedes, voluntariamente, ordenar al cuerpo que aumente su frecuencia vibratoria hasta pasar del nivel de la materia al nivel de la luz. Esto se llama «ascensión».
La ascensión es simplemente la manera de llevar la totalidad de tu ser a otra dimensión de tu conciencia aceptada. La muerte es ciertamente una manera de llegar ahí, pero eso significa permitir que la estructura del cuerpo envejezca, se desmorone, y deje de ser. Entonces ya no tienes tu cuerpo. La ascensión es llevarte el cuerpo contigo.
Todos aquellos que han ascendido en este plano, conquistaron lo máximo, que es la muerte. Ellos aprendieron a elevar, mediante el poder de su pensamiento, la frecuencia vibratoria de las estructuras moleculares de su cuerpo, hasta el punto en que pudieron llevárselo con ellos hasta la existencia de la luz, pasando así por encima de la muerte para siempre.
Estudiante: No estoy segura de entender de qué forma la ascensión te capacita para volver a este plano.
Ramtha: Verás, maestra: cuando llevas tu cuerpo contigo, puedes aumentar o disminuir su frecuencia a cualquier nivel que elijas. Así, si eliges volver a esta frecuencia, nunca más tienes que buscar otro cuerpo, con otro ego, para experimentar otra vida, con otra familia, en otro lugar. No es necesario nacer otra vez en este plano de pensamiento limitado, sólo para experimentar la programación de la conciencia social y tener que luchar por la expresión del Yo para recobrar tu saber interior. No necesitas aprender de nuevo que el cuerpo puede restablecer su forma de luz pura, aquella de la cual procede. No tienes que aprender otra vez que esto es simplemente una ilusión y un juego.
Cuando domines la ascensión, conservarás tu cuerpo para siempre, y podrás ir y venir cuando quieras con tu propio cuerpo. Entonces, en cualquier momento que desees ser parte de este plano otra vez, todo lo que tienes que hacer es bajar la vibración del cuerpo hasta que vibre en la misma frecuencia que este plano, y aquí estás.
Todos los que están aquí son capaces de ascender, porque aquello que se esconde detrás de la ilusión de la carne es el creador de todos los universos; y tú, por decisión propia y a través del pensamiento ilimitado, puedes hacer que ocurra esta manifestación. Cuando aprendes a dominar el juicio en contra de tus propios pensamientos y te permites recibir todo el pensamiento, tienes el poder y la capacidad de convertirte en cualquier ideal que imagines. Entonces puedes hacer o convertirte en cualquier cosa con el pensamiento. puedes tomar tu pensamiento, concentrarlo en el cuerpo, y ordenarle a éste que vibre más rápido. El cuerpo, entonces, se elevará hasta el ideal que el pensamiento está manteniendo firmemente. La totalidad del cuerpo empezará a vibrar a una velocidad mucho mayor. Mientras hace esto, la temperatura del cuerpo aumentará y el cuerpo empezará a brillar. Al continuar vibrando más rápidamente, la materia del cuerpo pasará a luz pura, y de ahí a pensamiento puro.
Entonces, aquello que era visible deja de ser visto.
Estudiante: Parece que la ascensión es una cosa difícil de alcanzar, pues no se habla mucho de gente que haya ascendido.
Ramtha: Al contrario, maestra, la ascensión es muy fácil de alcanzar. En verdad, es mucho más simple que morir. Lo que es difícil de conseguir es superar el juicio en contra de tus propios pensamientos. Lo que es realmente difícil de conseguir es superar la ilusión del tiempo para permitirte a ti mismo la paciencia de hacerlo. Pero una vez lo consigues, la ascensión es simplemente un pensamiento más. Entonces has conservado tu cuerpo para el resto de los tiempos, y puedes ser un viajero en cualquier plano y en cualquier momento que lo desees.
Estudiante: ¿Y nunca experimentas la muerte?
Ramtha: Nunca. ¿Cómo podrías cuando estás por encima de ella? Sabes, la muerte es una gran ilusión. La muerte es una realidad aceptada en este plano, la cual todos piensan que debe existir, por eso, se ha convertido en una realidad. Entidad, la única realidad es la vida, todo lo demás es una ilusión. Las ilusiones son pensamientos, que a su vez son juegos que se convierte en realidades.
La muerte no es una regla necesaria en este reino. Es mucho más fácil llevarte el cuerpo contigo, entonces no tienes que nacer de nuevo a través del canal del nacimiento en una conciencia que, lamentablemente, no acepta tu memoria.
Estudiante: Entonces, ¿no tenemos que morir?
Ramtha: Nadie tiene que morir. Tú morirás sólo si crees que lo harás. Pero el cuerpo no necesita morir. Los dioses que lo diseñaron no lo hicieron para que durara sólo un breve instante en el tiempo. Diseñaron el cuerpo para que viviera de sus glándulas, no de sus órganos; y a través del flujo de hormonas de sus glándulas, el cuerpo fue diseñado para vivir cientos de miles de años y nunca envejecer. Así fue como se programó en sus estructuras celulares. Hasta hace poco tiempo en vuestra historia, las entidades vivían durante miles de años.
La muerte es sólo el fin del cuerpo, no de la personalidad-yo. Pero es a través de las actitudes de la personalidad-yo que la fuerza vital del cuerpo se degrada, y el cuerpo provoca lo que se llama muerte.
Tu cuerpo responde sólo a lo que se le dice que haga. Tu alma, que está junto a tu corazón, gobierna la totalidad del cuerpo a través de su estructura emocional. El alma es lo que hace que las hormonas se repartan por todo el cuerpo para mantener la vida en él. El alma no hace esto por sí misma, sino bajo la dirección de tus actitudes y tus procesos de pensamiento. A causa de tus actitudes aquí, las hormonas dejan de crearse en el cuerpo después de la pubertad. Cuando éstas dejan de ser creadas, la hormona de la muerte se activa en el cuerpo y éste, en su totalidad, comienza a descomponerse, a envejecer y a morir. La hormona de la muerte se activa en el cuerpo porque tú vives bajo el sentimiento de culpabilidad y el juicio de ti mismo, y el miedo a la muerte. Y para ti, la belleza se basa totalmente en la apariencia de la juventud, no en el carácter del ser de alguien. Anticipas tu muerte al pagar la póliza de seguros de tu propio entierro. Pagas otra póliza para proteger tus tesoros si enfermas.
Estás haciendo todo lo posible para acelerar la enfermedad y la muerte de tu cuerpo porque la esperas totalmente.
El cuerpo es sólo un sirviente, un instrumento del pensamiento colectivo. Es una creación magnífica, el instrumento más refinado que existe. Pero no fue creado para tener una mente por sí mismo. Fue creado específicamente para ser un sirviente, y vivirá sólo el tiempo que tú le permitas vivir. Si tú aceptas los pensamientos de envejecimiento, esperando que el cuerpo se deteriore y muera, o te niegas a ti mismo amor, felicidad y alegría, tu cuerpo gradualmente descenderá hasta la corrupción de la muerte.
Sabes, maestra, en este preciso momento tú puedes parar el tiempo por completo y vivir en la eternidad de este ahora, si así lo eliges. Porque, ¿no es el tiempo una ilusión? ¿Quién lo ha visto? Existe aquí una gran hipocresía, te niegas a creer en lo invisible pero adoras totalmente al tiempo y estás esclavizado por él.
Tú tienes el poder exactamente dentro de ti, exactamente donde estás, de retroceder la edad de tu cuerpo que tu cuerpo envejezca y muera, cambia tu actitud. Deja que tu actitud diga que el cuerpo vivirá para siempre y así será. Suprime todas las cosas en tu vida que han reconocido el final de ella, y así ésta nunca tendrá fin. Nunca incluyas la palabra «viejo» en tu entendimiento del vocabulario; incluye «para siempre» en tu entendimiento. Cesa la celebración de tus cumpleaños, porque eso aún le da más credibilidad al proceso de envejecimiento. Si te complace reconocer tu nacimiento, hazlo, pero retrocede la cuenta de tus años y vuélvete más joven. Si no estás esperando tu muerte, nunca la conocerás.
Vive siempre en el presente. Nunca aceptes otro futuro más que este ahora. Tu ahora será la eternidad si tú se lo permites ser. Nunca contemples cuánto tiempo vas a vivir, pues vivirás para siempre. Contempla la eternidad de tu cuerpo, y en eso se convertirá. Así de simple es.
Ámate a ti misma, maestra. Bendice tu cuerpo. Hablale a tu alma, que es el señor de tu ser, y ordénale que produzca las enzimas de la juventud, y eso hará. Sabe que el cuerpo puede vivir para siempre. ¿Y cómo vive para siempre? Diciéndoselo.
La inmortalidad se alcanza sólo cuando uno acaba con el concepto de la mortalidad. Esta parodia llamada muerte podría ser eliminada por la totalidad de la humanidad si ellos vivieran no en el pasado o en el futuro, sino en la continuidad de este ahora y si la actitud de vivir fuera más grande que la perspectiva de morir. Esto será eliminado en los años venideros, pues el tiempo dejará de existir y este entendimiento se habrá convertido en una realidad viva dentro de cada uno sobre vuestro plano. Entonces la muerte se habrá convertido en algo sin sentido.
Estudiante: ¿Es la ascensión algo que tú puedas prever que muchos de nosotros alcancemos en esta vida?
Ramtha: Muy pocos ascenderán en esta vida, pues pocos se darán cuenta y apreciarán verdaderamente lo que se ha enseñado aquí. Muchos morirán porque reconocen la vejez y el deterioro, y se preocupan por la espléndida máquina que los lleva sólo hasta el punto en que se vea bonita. Por lo tanto, ellos envejecerán, y el cuerpo caerá en la corrupción. Entonces, el espíritu y el alma serán liberados de su unión con el cuerpo. De todos modos, para poder volver a este plano de densidad de la materia, necesitarán un vehículo a través del cual expresar; de este modo funciona el renacimiento de los maestros.
La mayoría aquí morirá. Pero eso no significa que eso sea todo para ellos. Simplemente significa que la máscara del cuerpo se separa, y deberán tomar otra. Pero si realmente eligen volver aquí, volverán a una conciencia que les facilitará la ascensión, pues ésta pronto será una realidad comprendida y aceptada.
Estudiante: ¿Hay alguna cosa que pueda hacer o darle a mi cuerpo que ayude a mi bebé?
Ramtha: La única cosa que necesitas hacer con respecto a tu cuerpo, maestra, es no preocuparte del aspecto que tenga. Sabe que es hermoso a todas horas y tu bebé sentirá lo mismo cuando salga. No importa cuánto hayas engordado, él será un alma feliz. ¿Has aprendido?
Estudiante: Mucho, gracias.
Ramtha: Y maestra, cuando críes a tu hermano, nunca le digas que la vida será más dulce cuando crezca. Hacerle eso a otra entidad es algo muy limitado. Crea el entendimiento de que cada momento de su vida es importante. Permite a tu niño crecer despacio, y déjale ser un niño tanto tiempo como él lo desee. Entonces serás una maravillosa bendición para uno de tus amados hermanos, y podrás compartir su alegría de estar en este plano. Que asi sea.
Extracto de: El libro blanco - Ramtha
Nadie es realmente el padre o la madre de ningún otro. Todos somos hijos e hijas del principio Madre/Padre de la vida llamado Dios. Todos aquí somos hermanos y hermanas uno del otro. Tus hijos y tus padres son en realidad tus hermanos, y partes iguales de la mente de Dios.
Cada entidad sabe antes de venir aquí que no está volviendo para ser la más bella, el más rico o el más desgraciado de los pobres. Vuelve aquí porque quiere vivir aquí y emprender el aprendizaje emocional de este nivel, para obtener entendimientos emocionales que quiere satisfacer dentro de su ser. Ese es el verdadero tesoro de las experiencias de tu vida, tanto aquí como en otros planos o dimensiones, pues eso es lo único que permanece contigo a través de la eternidad.
La entidad que te ha elegido a ti, maestra, fue lo que llamas el padre del padre de tu padre. Va a volver a través del linaje que él empezó hace más de un siglo. Tu deseo de engendrar hermanos le permite su regreso, porque ahora tiene un vehículo a través del cual poder volver. Esta entidad espera «en fila», por decirlo de alguna manera, el fruto que vas a traer. Hay muchas entidades en esta audiencia que tienen entidades a su alrededor, en su campo luminoso, que están ahí «esperando en la fila» a que ocurra la concepción.
Estudiante: ¿Quiere decir eso que, si es el padre del padre de mi padre, es un muchacho?
Ramtha: Efectivamente. ¿Te parece bien?
Estudiante: Oh, sí ¡Muchísimo! Ramtha, tengo otra pregunta. ¿Siempre tenemos que atravesar el canal del nacimiento para volver aquí?
Ramtha: Para contestar tu pregunta, maestra, deseo que entiendas que este es el plano de la percepción tridimensional. Es el plano donde el pensamiento es visible en la forma tridimensional llamada materia. Este plano es la densidad de la materia porque el pensamiento se ha extendido hasta una frecuencia vibratoria llamada luz, que luego se ha reducido para convertirse en electrum, del electrum pasar a materia sólida y de la materia sólida convertirse en la solidez de este plano. Por lo tanto, la materia de este plano es luz cuya frecuencia vibratoria se ha reducido hasta tomar su forma más densa.
Para que todas las cosas tengan aquí la misma densidad tienen que vibrar en la misma frecuencia. Por lo tanto, tu cuerpo está vibrando en la misma frecuencia que la silla en que te sientas. Este nivel existe para ti porque los sentidos de tu cuerpo han sido diseñados para percibir las frecuencias de luz más lentas, llamadas materia.
Como tú eres, en esencia, una energía de luz cuya frecuencia vibratoria es mayor que la densidad de la materia, si no poseyeras un cuerpo material, pasarías a través de la materia de este plano. Por eso el cuerpo es lo que te permite, a través de su densidad y sus órganos sensoriales, percibir, experimentar, e interactuar con la materia de este plano.
Por lo tanto, si deseas ser parte de esta frecuencia, debes habitar y formar parte de un cuerpo manifestado. Una manera de poseer un cuerpo es nacer a través del canal del nacimiento. La única otra manera de tener un cuerpo para experimentar este plano es: nacer a través del canal del nacimiento, conservar totalmente la integridad del Yo, y activar la totalidad del órgano llamado cerebro. Una vez que has abierto plenamente la capacidad de tu cerebro, puedes, voluntariamente, ordenar al cuerpo que aumente su frecuencia vibratoria hasta pasar del nivel de la materia al nivel de la luz. Esto se llama «ascensión».
La ascensión es simplemente la manera de llevar la totalidad de tu ser a otra dimensión de tu conciencia aceptada. La muerte es ciertamente una manera de llegar ahí, pero eso significa permitir que la estructura del cuerpo envejezca, se desmorone, y deje de ser. Entonces ya no tienes tu cuerpo. La ascensión es llevarte el cuerpo contigo.
Todos aquellos que han ascendido en este plano, conquistaron lo máximo, que es la muerte. Ellos aprendieron a elevar, mediante el poder de su pensamiento, la frecuencia vibratoria de las estructuras moleculares de su cuerpo, hasta el punto en que pudieron llevárselo con ellos hasta la existencia de la luz, pasando así por encima de la muerte para siempre.
Estudiante: No estoy segura de entender de qué forma la ascensión te capacita para volver a este plano.
Ramtha: Verás, maestra: cuando llevas tu cuerpo contigo, puedes aumentar o disminuir su frecuencia a cualquier nivel que elijas. Así, si eliges volver a esta frecuencia, nunca más tienes que buscar otro cuerpo, con otro ego, para experimentar otra vida, con otra familia, en otro lugar. No es necesario nacer otra vez en este plano de pensamiento limitado, sólo para experimentar la programación de la conciencia social y tener que luchar por la expresión del Yo para recobrar tu saber interior. No necesitas aprender de nuevo que el cuerpo puede restablecer su forma de luz pura, aquella de la cual procede. No tienes que aprender otra vez que esto es simplemente una ilusión y un juego.
Cuando domines la ascensión, conservarás tu cuerpo para siempre, y podrás ir y venir cuando quieras con tu propio cuerpo. Entonces, en cualquier momento que desees ser parte de este plano otra vez, todo lo que tienes que hacer es bajar la vibración del cuerpo hasta que vibre en la misma frecuencia que este plano, y aquí estás.
Todos los que están aquí son capaces de ascender, porque aquello que se esconde detrás de la ilusión de la carne es el creador de todos los universos; y tú, por decisión propia y a través del pensamiento ilimitado, puedes hacer que ocurra esta manifestación. Cuando aprendes a dominar el juicio en contra de tus propios pensamientos y te permites recibir todo el pensamiento, tienes el poder y la capacidad de convertirte en cualquier ideal que imagines. Entonces puedes hacer o convertirte en cualquier cosa con el pensamiento. puedes tomar tu pensamiento, concentrarlo en el cuerpo, y ordenarle a éste que vibre más rápido. El cuerpo, entonces, se elevará hasta el ideal que el pensamiento está manteniendo firmemente. La totalidad del cuerpo empezará a vibrar a una velocidad mucho mayor. Mientras hace esto, la temperatura del cuerpo aumentará y el cuerpo empezará a brillar. Al continuar vibrando más rápidamente, la materia del cuerpo pasará a luz pura, y de ahí a pensamiento puro.
Entonces, aquello que era visible deja de ser visto.
Estudiante: Parece que la ascensión es una cosa difícil de alcanzar, pues no se habla mucho de gente que haya ascendido.
Ramtha: Al contrario, maestra, la ascensión es muy fácil de alcanzar. En verdad, es mucho más simple que morir. Lo que es difícil de conseguir es superar el juicio en contra de tus propios pensamientos. Lo que es realmente difícil de conseguir es superar la ilusión del tiempo para permitirte a ti mismo la paciencia de hacerlo. Pero una vez lo consigues, la ascensión es simplemente un pensamiento más. Entonces has conservado tu cuerpo para el resto de los tiempos, y puedes ser un viajero en cualquier plano y en cualquier momento que lo desees.
Estudiante: ¿Y nunca experimentas la muerte?
Ramtha: Nunca. ¿Cómo podrías cuando estás por encima de ella? Sabes, la muerte es una gran ilusión. La muerte es una realidad aceptada en este plano, la cual todos piensan que debe existir, por eso, se ha convertido en una realidad. Entidad, la única realidad es la vida, todo lo demás es una ilusión. Las ilusiones son pensamientos, que a su vez son juegos que se convierte en realidades.
La muerte no es una regla necesaria en este reino. Es mucho más fácil llevarte el cuerpo contigo, entonces no tienes que nacer de nuevo a través del canal del nacimiento en una conciencia que, lamentablemente, no acepta tu memoria.
Estudiante: Entonces, ¿no tenemos que morir?
Ramtha: Nadie tiene que morir. Tú morirás sólo si crees que lo harás. Pero el cuerpo no necesita morir. Los dioses que lo diseñaron no lo hicieron para que durara sólo un breve instante en el tiempo. Diseñaron el cuerpo para que viviera de sus glándulas, no de sus órganos; y a través del flujo de hormonas de sus glándulas, el cuerpo fue diseñado para vivir cientos de miles de años y nunca envejecer. Así fue como se programó en sus estructuras celulares. Hasta hace poco tiempo en vuestra historia, las entidades vivían durante miles de años.
La muerte es sólo el fin del cuerpo, no de la personalidad-yo. Pero es a través de las actitudes de la personalidad-yo que la fuerza vital del cuerpo se degrada, y el cuerpo provoca lo que se llama muerte.
Tu cuerpo responde sólo a lo que se le dice que haga. Tu alma, que está junto a tu corazón, gobierna la totalidad del cuerpo a través de su estructura emocional. El alma es lo que hace que las hormonas se repartan por todo el cuerpo para mantener la vida en él. El alma no hace esto por sí misma, sino bajo la dirección de tus actitudes y tus procesos de pensamiento. A causa de tus actitudes aquí, las hormonas dejan de crearse en el cuerpo después de la pubertad. Cuando éstas dejan de ser creadas, la hormona de la muerte se activa en el cuerpo y éste, en su totalidad, comienza a descomponerse, a envejecer y a morir. La hormona de la muerte se activa en el cuerpo porque tú vives bajo el sentimiento de culpabilidad y el juicio de ti mismo, y el miedo a la muerte. Y para ti, la belleza se basa totalmente en la apariencia de la juventud, no en el carácter del ser de alguien. Anticipas tu muerte al pagar la póliza de seguros de tu propio entierro. Pagas otra póliza para proteger tus tesoros si enfermas.
Estás haciendo todo lo posible para acelerar la enfermedad y la muerte de tu cuerpo porque la esperas totalmente.
El cuerpo es sólo un sirviente, un instrumento del pensamiento colectivo. Es una creación magnífica, el instrumento más refinado que existe. Pero no fue creado para tener una mente por sí mismo. Fue creado específicamente para ser un sirviente, y vivirá sólo el tiempo que tú le permitas vivir. Si tú aceptas los pensamientos de envejecimiento, esperando que el cuerpo se deteriore y muera, o te niegas a ti mismo amor, felicidad y alegría, tu cuerpo gradualmente descenderá hasta la corrupción de la muerte.
Sabes, maestra, en este preciso momento tú puedes parar el tiempo por completo y vivir en la eternidad de este ahora, si así lo eliges. Porque, ¿no es el tiempo una ilusión? ¿Quién lo ha visto? Existe aquí una gran hipocresía, te niegas a creer en lo invisible pero adoras totalmente al tiempo y estás esclavizado por él.
Tú tienes el poder exactamente dentro de ti, exactamente donde estás, de retroceder la edad de tu cuerpo que tu cuerpo envejezca y muera, cambia tu actitud. Deja que tu actitud diga que el cuerpo vivirá para siempre y así será. Suprime todas las cosas en tu vida que han reconocido el final de ella, y así ésta nunca tendrá fin. Nunca incluyas la palabra «viejo» en tu entendimiento del vocabulario; incluye «para siempre» en tu entendimiento. Cesa la celebración de tus cumpleaños, porque eso aún le da más credibilidad al proceso de envejecimiento. Si te complace reconocer tu nacimiento, hazlo, pero retrocede la cuenta de tus años y vuélvete más joven. Si no estás esperando tu muerte, nunca la conocerás.
Vive siempre en el presente. Nunca aceptes otro futuro más que este ahora. Tu ahora será la eternidad si tú se lo permites ser. Nunca contemples cuánto tiempo vas a vivir, pues vivirás para siempre. Contempla la eternidad de tu cuerpo, y en eso se convertirá. Así de simple es.
Ámate a ti misma, maestra. Bendice tu cuerpo. Hablale a tu alma, que es el señor de tu ser, y ordénale que produzca las enzimas de la juventud, y eso hará. Sabe que el cuerpo puede vivir para siempre. ¿Y cómo vive para siempre? Diciéndoselo.
La inmortalidad se alcanza sólo cuando uno acaba con el concepto de la mortalidad. Esta parodia llamada muerte podría ser eliminada por la totalidad de la humanidad si ellos vivieran no en el pasado o en el futuro, sino en la continuidad de este ahora y si la actitud de vivir fuera más grande que la perspectiva de morir. Esto será eliminado en los años venideros, pues el tiempo dejará de existir y este entendimiento se habrá convertido en una realidad viva dentro de cada uno sobre vuestro plano. Entonces la muerte se habrá convertido en algo sin sentido.
Estudiante: ¿Es la ascensión algo que tú puedas prever que muchos de nosotros alcancemos en esta vida?
Ramtha: Muy pocos ascenderán en esta vida, pues pocos se darán cuenta y apreciarán verdaderamente lo que se ha enseñado aquí. Muchos morirán porque reconocen la vejez y el deterioro, y se preocupan por la espléndida máquina que los lleva sólo hasta el punto en que se vea bonita. Por lo tanto, ellos envejecerán, y el cuerpo caerá en la corrupción. Entonces, el espíritu y el alma serán liberados de su unión con el cuerpo. De todos modos, para poder volver a este plano de densidad de la materia, necesitarán un vehículo a través del cual expresar; de este modo funciona el renacimiento de los maestros.
La mayoría aquí morirá. Pero eso no significa que eso sea todo para ellos. Simplemente significa que la máscara del cuerpo se separa, y deberán tomar otra. Pero si realmente eligen volver aquí, volverán a una conciencia que les facilitará la ascensión, pues ésta pronto será una realidad comprendida y aceptada.
Estudiante: ¿Hay alguna cosa que pueda hacer o darle a mi cuerpo que ayude a mi bebé?
Ramtha: La única cosa que necesitas hacer con respecto a tu cuerpo, maestra, es no preocuparte del aspecto que tenga. Sabe que es hermoso a todas horas y tu bebé sentirá lo mismo cuando salga. No importa cuánto hayas engordado, él será un alma feliz. ¿Has aprendido?
Estudiante: Mucho, gracias.
Ramtha: Y maestra, cuando críes a tu hermano, nunca le digas que la vida será más dulce cuando crezca. Hacerle eso a otra entidad es algo muy limitado. Crea el entendimiento de que cada momento de su vida es importante. Permite a tu niño crecer despacio, y déjale ser un niño tanto tiempo como él lo desee. Entonces serás una maravillosa bendición para uno de tus amados hermanos, y podrás compartir su alegría de estar en este plano. Que asi sea.
Extracto de: El libro blanco - Ramtha
Fuente:
http://www.trabajadoresdelaluz.com
07 de Enero 2018