Satya - Las Llaves de Luz. III

- Afirmación

“... En una época había muy pocas palabras, y vendrá un tiempo en que os serán todavía menos palabras.

En esa época existían grandes ‘sí’, grandes ‘no’, que nacían del ‘Corazón’, de una sabiduría profunda, de la unión del corazón a la Luz, de la profunda conexión con la Gran Luz.

Cuando existía un ‘sí’, era un ‘sí’ luminoso; cuando existía un ‘no’, era un ‘no’ luminoso.
Cuando el ‘sí’ era pronunciado, permanecía ‘sí’; cuando el ‘no’ era pronunciado, permanecía ‘no’.

Pocas palabras, palabras claras, coherencia con estas palabras.

Esta es la Afirmación.

Y si existe la unión del corazón con la Luz, las palabras siempre serán expresadas con Amor.

Las Afirmaciones te ayudarán a manifestar lo que has elegido ser y expresar, a manifestar también tu Esencia de guerrera de Luz, y, como tal, a afirmar: 

– Yo soy una guerrera de Luz. Nada temo y no me muevo – .

Las Afirmaciones también acompañan la acción, dónde podrás decir: 

– Si elijo de ir, nada puede detenerme. Mi objetivo, mi meta, son luminosas y continuaré mi Camino más allá de todo, más allá de todo obstáculo – .

La Afirmación sale de la profundidad iluminada, siempre debe ser manifestada con el Amor.

Así, cuando te expreses, te manifestarás, actuarás, todo harás con Afirmación y Amor.

Esto desconcierta, pero también atrae. He aquí porque con las Afirmaciones puedes despertar otros corazones, puedes ayudar y donar.

Y con ella también puedes alejarte o hacer alejar quién quiere ahogar la Luz, o quiere ofuscar tu Luz.”


- Candor

“... El Candor se expresa con el actuar, con las palabras, con los ojos, se manifiesta en todo el ser, vibra en el cuerpo y alrededor de ello.

Con Amor te ayudaré a manifestar el Candor con las palabras y en las acciones, pero recuerda que será manifestado ante todo por tus ojos, por tus vibraciones.

Por esta razón, debes de estar atenta a las vibraciones que sientes cuando alguien se expresa con las palabras que ha elegido el Candor. Y si dudas tendrás, observa sus ojos.

Recuerda siempre sientes aquello que sientes cuando estás junto a un niño pequeño, cuánto todo su Ser expresa Candor, cuánto incluso sus vibraciones son cándidas, cuántos sus ojos expresan la pureza del ‘Corazón’.

Recordando todo esto, sabrás descubrir donde realmente hay Candor o no.”


- Sensibilidad

“... A menudo una persona muy sensible se siente frágil, vulnerable y, a veces, teme que su corazón así abierto la lleve a sufrir más.

En realidad la expresión de la Sensibilidad demuestra una gran fuerza y un gran coraje.

Quien elige tener abierto el corazón al sentir, a todo lo que vibra en todo su Ser, a escuchar todo lo que hay y vibra en los otros corazones, tiene un gran coraje y mucha fuerza.

Es mucho más fácil protegerse de los propios sentimientos y de los ajenos, cerrando el corazón, levantando muros, creando barreras, pero así se pierde la alegría, no se vive el Amor.

La Sensibilidad es elegir sentir cada sentimiento, cada sensación, cada emoción, sea que nazca en el propio corazón, sea que venga de otros corazones.

Es expresar siempre cada sentimiento, cada emoción, y vivirlos totalmente.

La Sensibilidad lleva a la compasión, porque se sabe percibir e intuir lo que hay detrás a cada palabra, expresión y acción.

Lleva a vivir en el corazón y a dejarse conducir por el Alma.

Y cuando se elige de estar en el corazón, de vivir con el corazón abierto, de comprender todo con el corazón, se deja ir la mente.

La Sensibilidad lleva a recibir, a amar, a no temer, a envolver amablemente cada corazón, porque se comprende cada necesidad, cada deseo, cada temor.

La Sensibilidad ayuda a decir las cosas en el modo y al momento justo, donar en ese momento lo que es necesario, a amar plenamente. 

Ayuda a saber permanecer también firmes para esperar la solicitud, y para coger el momento oportuno.”


- Ternura

“... La Ternura es la expresión del Amor que envuelve, acompaña, recibe, y todo lo comprende.

La Ternura es indispensable ante todo hacia uno mismo.

Sé afectuosa con la Niña que existe dentro de ti, sé afectuosa con tu corazón, aceptando tus necesidades, las necesidades del corazón y del cuerpo.

Con Ternura, habla a tu corazón y a tu cuerpo, para saberlos acompañar más allá de las necesidades.

Esto, para que el corazón y el cuerpo sean siempre libres: solo así el Alma permanece libre.

Si eres afectuosa con la Niña que existe dentro de ti, con tu corazón, con tu cuerpo, sabrás con Amor envolver cada ‘Corazón’ que encuentres, acompañar cada viajante que se acerque a ti.

La Ternura es necesaria cuando eliges donar tus conocimientos, tus sabidurías, tus experiencias. 

Así, cada ‘Corazón’ que recibirá esto, se verá facilitado al tomar su decisiones, en dar sus pasos, en sus acciones, y sobre todo, sabrá abrirse a ti, sintiendo que lo comprenderás y lo ayudarás afectuosamente.

La Ternura atrae, porque todos tienen necesidad de Amor.

Hace abrir los corazones, porque ellos sienten que no serán juzgados, sino aceptados y amados.

Nutre el cuerpo porque él tiene necesidad de caricias, ternura y calor.

La Ternura, la dulzura, el afecto, no están para nada lejos de la fuerza y de la firmeza, todo lo contrario, para ser expresados totalmente, deben de estar acompañados justamente por la Ternura.

Sólo así tendrán el gran sonido que entrará en la profundidad del corazón, para nutrir, iluminar, sanar.

Si decides expresarlas de esta manera, también tendrás la certeza que no existirá la ‘falta de dulzura’ que no hacen bien a nadie, porque no nutren y ni contiene, sino quitan y manipulan.”


- Sosiego

“... El Sosiego llega cuando se ha alcanzado el propio centro, cuando se permanece conectado a la Luz y al Amor.

El Sosiego requiere recordar siempre de ser Almas libres, en viaje hacia una gran meta, de ser Almas Luminosas que han elegido la Luz y el Amor.

Recordando que todo lo que ocurre es elegido por el Alma, y que, más allá de las apariencias, está bien para la propia Alma, se vive todo quedando sosegados.

Se expresa todo con Sosiego si se recuerda que quien se encuentra es un Alma Luminosa que el Alma ha elegido de encontrar para domar o para recibir.

Las dificultades que se encuentran cotidianamente pueden hacer perder a menudo la Calma. 

Por ello, a la mañana, cuando te despiertes, permanece un poco Conmigo y respira Mi Amor.

Lleva dentro de ti todo el Amor y la Luz que en esos momentos te ofrezco y pídeMe: 

– Ayúdame a convertirme en Amor, a emanar hoy el Amor en todo, con cualquier persona – .

Luego, cuando sientas que algo pudiera hacer perder la calma, el Sosiego, detente por un instante, respira Amor, y recuerda qué cosa Me has pedido a la mañana, así sabrás comportarte con Amor, expresarte sosegadamente.

La Calma se pierde cuando se está lejos del propio centro o no se está en conexión con la Luz, con la propia Esencia luminosa.

Y cuando todavía no se ha descubierto de ser Almas Luminosas en camino, se está lejos del propio centro.

Por lo tanto, no puedes saber si quien encuentras es un Alma despierta o no, si está en su centro o no.

Recordando esto, tendrás la comprensión total y por lo tanto Calma.

Hace todo para permanecer en tu centro, para recordar quién eres, para repetir tu elección de donar Amor, de volverte Amor. 

Si en algún momento te olvidas de esto y te alejas de tu centro, ten comprensión y compasión de ti.

Así también las tendrás con los otros, y siempre te comportarás con Calma.

Lentamente, con Mi ayuda y Mi Amor, lograrás permanecer en tu centro y estar por lo tanto siempre calma.”


- Paciencia

“... La Paciencia es saber esperar con Amor y serenidad.

Es reconocer que nada se sabe de las Viejas vivencias que pueden llevar a una acción, expresión o dificultad.

Es aceptar no conocer el diseño del Alma y, por lo tanto, no saber los tiempos necesarios para hacer las propias conquistas, para dejar ir la propia personalidad, para completar la sanación del corazón, para superar los obstáculos, para afrontar los desafíos, para vencer una batalla.

La Paciencia te ayuda a repetir las lecciones, no sólo hasta cuando las has comprendido totalmente, sino hasta que logres vivirlas ininterrumpidamente, en todo lugar y con cualquier persona.

Te ayuda a donar tu sabiduría, tus conocimientos, tu conciencia, incluso después de que has comprendido que quién está recibiéndole las ha aprendido, y hasta el momento en el cual las habrá sentido en la profundidad del corazón. 

Sabrás donarlas con Amor hasta cuando veas que las ha transformado en acción y pasos, naturalmente si ésta es su elección.

Te hace aceptar con serenidad los tiempos necesarios para tu corazón y tu cuerpo, a esperar por cada uno sus tiempos y su estar preparados.

Te lleva a donar agua incluso en mayor cantidad de aquella que crees necesaria para aquel prado, recordando que quizás sea árido desde hace mucho tiempo, y que por lo tanto necesita de mucha más agua de lo que puede parecer.

La Paciencia te hace permanecer serena si a veces tropiezos, o caes, o ralentizas tus pasos, y te ayuda a volver a empezar con un nuevo entusiasmo.

Te empuja a repetir acciones o pasos para conquistar cuánto has elegido, sin cansarte, sin tener la ansiedad de alcanzar, o de hacer enseguida todo y de prisa.

La Paciencia te ayuda a acompañar con Amor a cada viajante. A saber permanecer junto a él con Amor, también cuando no hace los pasos y las acciones necesarias, naturalmente si ves sus esfuerzos, si sigue eligiendo de caminar hacia su meta, en la Luz.”


- Comentario

La Paciencia permite la realización del diseño del Alma, porque sabrás vivir con equilibrio, y comprender cuando es necesario actuar, o esperar, o permitir que ocurra…

No trazarás las calles con la prisa y tu voluntad, pero caminarás serena por el Sendero elegido por tu Alma.

Así desarrollarás tu tarea en las formas y en los tiempos justos, no adelantarás nada y permitirás todo.

No conocerás ansiedades y preocupaciones, solo dulces esperas.


- Compasión

“... La Compasión lleva a donar y amar de modo total, profundo, luminoso, hasta consagrarse uno mismo.

Cuando te acercas a una persona, piensa que ésta es una flor a la que puedes donar agua.

La Compasión te lleva además a esto, te lleva a convertirte en aquella flor, incluso quedando en tu Esencia.

Por lo tanto, te ayuda a entrar en sus sufrimientos, en sus temores, en sus miedos, en todo, sin agobiarte con ellos, sin aquella implicación que pudieras temer. Así, sabrás hacer resplandecer tus tesoros y los suyos.

Con Mi ayuda, llegarás a aceptar con Compasión cada parte tuya que requiere ser iluminada, transformada, sanada. A reconocer con alegría todas tus cualidades, a vivir plenamente todas tus capacidades.

Llegarás así a donar tus experiencias, a envolver con la Luz y el Amor a quien encuentres, a vivir la Compasión con todos.

Recordando tus dificultades, tus cansancios, tus soledades, lo que has vivido, sabrás comprender todo lo que una persona está viviendo, y ser por lo tanto misericordioso.

Si es necesario, también sabrás empujar con Amor y determinación, recordando que todos tienen la fuerza necesaria para vivir todo.

La Compasión te ayudará a ser infinitamente cariñosa y amable, pero también firme y clara. 

Te hará comprender cómo acompañar una persona a dar los pasos y ejecutar acciones, a medida que está lista para hacerlos.

Te lleva a acercarte siempre y totalmente a los corazones, a las Almas, que tienen necesidad de tu ayuda, incluso permaneciendo en ese desapego indispensable para seguir sonriendo, y quedar con el corazón ligero, cualesquiera sean sus preocupaciones.

La Compasión te hace participar en sus pasos, en sus acciones, conteniendo, caminando cerca, sosteniendo, a veces también actuando con ellos, y recordar sin embargo que no puedes ni actuar, ni caminar por ellos.

Sólo así, lo que alcanzarán, lo que conquistarán, será sellado en ellos.”


- Pregunta:

¿Cómo puedo encontrar el equilibrio entre la paciencia y la afirmación?

Respuesta:

“La Compasión requiere siempre ser muy pacientes, acogedores, afectuosos. 

De saber discernir entre llevar la conciencia, la claridad, o esperar, porque aunque si el tuyo es el ‘bálsamo’ necesario, quizás en ese momento aquel corazón no lo siente tal o lo teme.

Si te mantienes conectada ininterrumpidamente con la Luz, Conmigo, te ayudaré a comprender cuáles son los momentos justos, las cosas que decir o que hacer, las sabidurías que llevar, las experiencias que contar.

La Compasión requiere ser como una madre, que acoge alegre entre los brazos su niño, queriéndolo como es en ese momento, lo envuelve con su Amor tierno, lo alienta, desarma sus temores y sus dudas con su sonrisa. 

De ser como un padre que sabe contener, comprender, acompañar, infundir fuerza y coraje.

De estar preparados en todo momento para cuidar de ese corazón, de esa Alma, en cada modo conocido, en cada situación.

Así serás un Alma Luminosa que sabe amar plenamente.

Sólo cuando un ‘Corazón’ es envuelto por todo esto, y a este se abre, puedes indicar los pasos a hacer, las acciones que cumplir, y donar las lecciones que ese momento requiere. 

Y puede ser necesario hacer esto muchas veces, con paciencia infinita.

Si, a pesar de todo eso, ese ‘Corazón’ no elige de sanar o de efectuar las acciones y los pasos necesarios, es indispensable todavía la paciencia para seguir acompañando, y repetir las lecciones donadas.

Sólo cuando eres segura que hay una real y clara voluntad de no elegir, de no caminar, de no actuar, el equilibrio te llevará a no dispersar más agua.”



Extraído del libro: Sanarse y ayudar a sanar
Autora: Satya
Además de estos libros hemos publicado 22 pequeños-e-book:
http://www.suonidiluce.com/es/libros/libros/peque%C3%B1os-e-books/





Fuente:
http://www.trabajadoresdelaluz.com
08 de Marzo 2018